“Yo no soy ningún virtuoso ni soy ningún pacato y a lo mejor he estado en algún prostíbulo alguna vez. Lo importante es que en algún momento nos demos cuenta de lo que está pasando. Y hoy yo tengo muy en claro lo que está pasando.”

Hoy no volvería...

–No. Ni loco –sentenció el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, en el programa Los que se vienen, de Radio Nacional, conducido por Julia Mengolini.

El testimonio refleja un cambio en los varones que tomaron como parte de su cultura el consumo de prostitución y hoy viraron esa posición. “Nosotros hicimos la ley de trata. Si el menor dio el consentimiento ante el Papa –perdón, que no se tome como una falta de respeto–, escribano, madre o quien sea, igual no hay consentimiento. Eso es trata... Ahora hay una ley que se está tratando de modificar que va a impedir el consentimiento del mayor. Y yo estoy de acuerdo con eso. Sigamos profundizando este tema y profundicemos las penas”, acordó con organizaciones que piden que también se presuma que las mujeres adultas encontradas en prostíbulos están esclavizadas sexualmente.

Fernández también resaltó el impacto que le causó el relato de una joven rescatada de una organización de trata en Lanús: “Una de las chicas contó que había sido víctima de un aborto hacía poquito tiempo; que le habían practicado el aborto en el prostíbulo y que habían enterrado el feto en el fondo en tal lugar. Entonces el juez, en La Plata, ordenó a dos policías federales cavar; los policías se avinieron, fueron, cavaron y encontraron el feto. Esa mujer dijo que al segundo día que le habían practicado el aborto le pusieron a modo de apósito una esponja y la mandaron a trabajar. También encontramos un prostíbulo en Azul donde a las mujeres, después de trabajar, las metían en calabozos con rejas y candados. Es decir... No sé si la gente es consciente de esto que estamos discutiendo. Si una mujer se quiere prostituir y es su vocación prostituirse no me voy a meter. Pero con la trata de mujeres no se jode”.