Dos días. Ni un fin de semana largo tienen los padres por ser padres. No solamente es una vulneración a los derechos de los varones de ver nacer a sus hijos, llevarlos a su casa y disfrutar de un hijo. Tampoco es sólo un retraso arcaico en el aggiornamiento de la paternidad moderna que acompaña más el nacimiento y crecimiento de los hijos.

Además es un triunfo de las empresas que no quieren perder días de supuesta productividad y que ya frenaron al menos dos proyectos en el Congreso Nacional, uno, incluso, con media sanción en Diputados y otro presentado por el diputado y abogado de la CGT Héctor Recalde.

Pero, además, la falta de licencia parental genera una situación de desamparo para las madres que no llegan a salir de la clínica y tienen que quedarse solas con un nuevo bebé que –si son primerizas– para su sorpresa no las deja ni ir al baño. Y si tienen otros hijos/as tampoco saben cómo repartirse entre los celos de unos y el nacimiento de otros/as.

Mientras que, en la actualidad, diversas situaciones también necesitan ser contempladas, como las de las mamás y papás adoptivos/as que no tienen los mismos derechos que los padres y madres biológicos. Y la de las mamás lesbianas que no cuentan con licencia por maternidad cuando el embarazo lo lleva su compañera o esposa.

Para ir paliando alguno de estos baches legislativos en la Legislatura porteña Diana Maffía presentó un proyecto de ley. Ella va a terminar su mandato este año. Y para que la idea logre concretarse, el legislador Rafael Gentili (Bloque Proyecto Sur) presentó un proyecto de ley para extender y mejorar las licencias por embarazo y adopción a las trabajador@s de la administración pública porteña.

La dificultad es que, aun de aprobarse la norma, no sería para toda la ciudadanía, sino para los/as trabajadores/as municipales. Pero, al menos, sería un pequeño avance y un ejemplo para las empresas privadas. Sin duda, las reformas tienen que ser mayores.

Aunque cada proyecto implica un pequeño avance. La iniciativa le daría 105 días de licencia a las mamás (15 más que la actual normativa) y se extiende en casos de nacimientos múltiples 15 días más por cada hijo/a nacido vivo. Mientras que si los bebés se encuentran internados la licencia dura todo el tiempo que transcurre durante la hospitalización. En el caso de la adopción, la licencia se amplía a 90 días y a 120 si la llegada de los nuevos niños/as a la casa es múltiple.

Y un gran avance es que la iniciativa incorpora la licencia por interrupción del embarazo (algo que nunca estuvo previsto para los abortos espontáneos o no punibles); extiende los días para los trabajadores varones a 15 días a lo que se suman 10 días más previamente e incluye en las jornadas laborales las posibilidades del nacimiento de un hijo/a, la interrupción de embarazo o el fallecimiento del niño/a.