Entre el 20 y el 25 de mayo transcurrió la edición número quince de la Feria Puro Diseño, con una puesta en escena que en algunos tramos reflejó prédicas de nuevos estilos en arquitectura aplicados a vitrinas y exhibidores y en otros pareció recrear el clima variopinto de los bazares y las ferias indies. En su inventario asomaron lámparas que se jactan de la simpleza de antiguos cables para planchas como ornamento, diversidad de potiches y piezas utilitarias en cerámica, odas a la mantelería y a las macetas junto con mates y otros desarrollos en fieltro. En un recorrido por la indumentaria, un espacio ideado por la revista Vanidades y con la curaduría de la estilista Matilde Quintana, exhibió una pequeña tienda departamental dedicada a nuevas manifestaciones de la moda imprescindible en el direccionario de la publicación; allí se pudo ver la sastrería de Jorge Fashion & Tailoring (tal es la denominación del proyecto sartorial del diseñador Jorge Pedalino, quien reformula trajes de pantalón y chaqueta), las construcciones y los textiles de Lena Martorello, la firma de Joan Martorello y Martinica Lena, que temporada tras temporada indaga en nuevas técnicas textiles y resignifica sus holgadas morfologías, un display de carteras sobres que replican obras de la modelo y artista plástica Naomi Preisler y los nobles abrigos en cashmere de F.P.

En representación de la moda académica transcurrió un concurso que respondió a la premisa de “diseñar una prenda de segunda o tercera piel que sea fácil de producir, comercializar y de usar en una feria”. Entre los quince proyectos preseleccionados, el jurado integrado por la arquitecta Andrea Saltzman, los diseñadores Fernando More, Ivana Crivos, Agustín Bossini, Julieta Grana, Marcelo Yarussi y Analía Sirabonian premió los diseños de Stephanie Mora Solís, Natalia Lamarca, Matías Hidalgo, Laura Layana y Juliana García Bello y Lucía Chain. Entre ellxs, el Ponchomono, un desarrollo de Hidalgo que transforma a un poncho de algodón en prenda deportiva cruza con túnica multicolor. Del lado de la indumentaria en su cruce con el arte, destacó un pequeño espacio apodado La Selección, ideado por los expertos del Inti, donde tres maniquíes de estirpe arty vistieron los ropajes más arts and crafts de la colección de Boerr Yarde Buller, junto con piezas rara avis en cerámica de María Duffy, mochilas con apariencia de delantales para oficios de Mambo y las joyas de Agustina Ros. Mientras que haciéndose eco de las necesarias prédicas ambientalistas abundaron las propuestas de diseño sustentable, un concurrido puesto pareció representar el ingenio argentino y su extraña galería de inventos: allí pares de pantuflas que contienen semillas de lavanda y otras pócimas, y que se calientan en un microondas para luego abrigar los pies de su usuario.

Consultada sobra los modos en que Puro Diseño se hace eco del estilo argentino y los modismos más representativos entre 2000 y 2015, Marcela Molinari, su directora, señaló: “La feria es una vidriera del diseño y moda de Argentina. Siguen existiendo los más vanguardistas, que se expresan en el uso de colores y materiales y resaltan el trabajo desde la morfología. Eso convive con propuestas que trabajan haciendo modificaciones propias a las tendencias. Esto se ve a nivel país, y eso que en el interior cuesta muchísimo más imponer nuevos parámetros de consumo. Desde allí se observan propuestas autóctonas que se animan a presentar sutiles cambios que hacen la diferencia. La feria atiende a diversos públicos y por su tamaño abarca distintas propuestas. Considero que es un tema de reflexión cómo marcas tan distintas como Marina Massone, Simones, Chwala y Juana de Arco son las más exitosas en ventas. Insisto en la calidad, el marco de la Feria Puro Diseño garantiza productos con alguna diferenciación, si éstos tienen calidad existe público para todos ellos. Y al tiempo de analizar los correlatos entre la moda y el interiorismo, agregó Molinari: “Se reflejan en los colores y en los recursos utilizados, mientras que la marca Florece tiene una propuesta de indumentaria para niños y para el hogar. Si tuviera que armar duplas de ambas disciplinas que están relacionadas destaco a F/P con Patricia Lascano, Lena Martorello con Voilà, o SUD y Julieta Grana”.