“Hay 250 niños y jóvenes que quedarían sin la atención que venían recibiendo en una asistencia territorializada en las zonas donde se mueven y se crían en la que se consideraba no solo a ese niño con problemas, sino a las problemáticas de las cuales emergía y se los asesoraba a ellos, a sus escuelas y a sus familias desde una mirada interdisciplinaria, intersectorial y territorializada que no apunta al encierro, sino a atenderlos como sujetos de derecho”, denuncia la psicopedagoga Gabriela Dueñas el anuncio del macrismo de cambiar la modalidad de atención en salud mental a niños, niñas y adolescentes.

“Si se concretan las medidas que están anunciadas en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires (todavía no está por escrito, pero sí se ha dado la orden verbal), se va a desarticular el modo de atención conocido como PAC y se va a volver al viejo paradigma en el que los niños son tomados como objetos en un retroceso terrorífico –apunta– que va a contrapelo de lo que se recomienda a nivel internacional y las leyes que están en vigencia a nivel nacional y de la ciudad, con el trasfondo de la mercantilización de la salud, porque se tercerizan estos servicios a hogares privados. Seguramente con intereses creados.”