Con la victoria que River consiguió ayer ante Colón, uno de los equipos protagonistas de este torneo Clausura, volvió a quedar en evidencia que cuando el plantel conducido por Leonardo Astrada recurre a sus futbolistas principales, el nivel de juego crece notoriamente. La caída en Paraguay ante Libertad, el último miércoles, acentuó esa realidad respecto del recambio de jugadores. Curiosamente, lo mismo sucedió cuando River se enfrentó a Banfield y Quilmes. A partir de esto, el entrenador seguramente ya tendrá delineado los nombres para afrontar los momentos decisivos de la temporada.
El arquero Costanzo parece ser el elegido para el puesto, luego de la “sanción” que le costó el viaje a Asunción, por llegar tarde a una práctica. Hasta el momento, la mejor línea defensiva que encontró el conductor fue la que jugó ayer ante los santafesinos, después de algunos desacoples en el inicio del certamen. Si bien Rojas es importante para la consideración de Astrada, el paraguayo no está hoy entre los elegidos.
Como el mediocampo de River es el que sufrió mayores modificaciones desde el inicio del año, ahora ya estarían consolidados los cuatro volantes que se presentaron ayer. Después de su regreso del seleccionado Sub 23, González le ganó el lugar al juvenil Sambueza por el sector izquierdo, y Mascherano también logró afirmarse como volante central, desplazando al experimentado Claudio Husain.
Las continuas lesiones de Marcelo Salas, quien junto a Cavenaghi sería la dupla de lujo en el ataque, provocaron que Montenegro recuperara su verdadero nivel. La definición sobre la continuidad del ex Independiente llegará cuando el chileno recupere su plenitud física.
Pero todo ese ideal futbolístico tendrá sorpresas a partir de julio, debido a la gran cantidad de jugadores que podrían emigrar. Costanzo continúa en los planes del Arsenal de Inglaterra. El préstamo de Garcé finaliza en dos meses y todavía no está decidida la renovación. Tuzzio pertenece al Olympique de Marsella y los franceses pretenderían cederlo a otra entidad europea. Mientras, González y Cavenaghi tienen muchas posibilidades de continuar su carrera en Italia, y Montenegro tampoco tiene asegurada su presencia para el segundo semestre. Para colmo, sus máximas estrellas, Gallardo y Salas, aún no definieron su situación, ya que dependen de la voluntad de sus clubes de origen, Mónaco y Juventus, respectivamente. Al mismo tiempo que se acerca el despegue definitivo, en el futuro de River aparecen algunos interrogantes.