Las salidas de River del estadio Monumental parecen ser un factor de conflicto. El equipo cambia su rendimiento cuando le toca visitar a sus rivales, y así los resultados en esa condición están lejos de ser los ideales. El plantel sólo obtuvo los tres puntos saliendo de Núñez en dos oportunidades este año: ante Tiro Federal y sobre los bolivianos de Oriente Petrolero, en el repechaje de la Copa Libertadores. Pero sin duda, nunca antes en este torneo, ni siquiera en la derrota en Rosario frente a Newell’s, exhibió un nivel tan deslucido como ayer ante Lanús, lo que le significó la segunda caída en el certamen después de diez encuentros. Y esto genera más incógnitas para el partido de pasado mañana, en San Pablo, ante Paulista.

River también volvió a “quebrar” otra racha anoche en el Sur, debido a que hacía tres años que no le convertían tres goles en el primer tiempo. La última vez había sido Estudiantes, en agosto del 2003.

En ese período, Lanús sacó esa ventaja con una contundencia asombrosa, pero sobre todo con un fútbol efectivo y sin miedos. En sólo 25 minutos marcó los tres tantos, y quedó la sensación de que pudieron ser algunos más, a partir de las desatenciones y la imprecisión de los jugadores de River, particularmente en el sector defensivo.

La gran actuación de Lanús, que ahora quedó como escolta de los líderes a sólo un punto, se dio a partir del desempeño de Fabbiani, un delantero de físico pesado, que con su técnica se encargó de trasladarles problemas a los marcadores centrales de River. Fabbiani recién tuvo su premio en el arco rival al marcar el cuarto gol, a los 28 minutos del segundo tiempo, después de definir con un tiro cruzado ante la presencia de Lux. Pero el jugador se tuvo tanta confianza ayer que incluso inició el segundo tiempo con un tiro directo al arco, en el saque desde el círculo central.

A esa altura, River había intentado una reacción al comienzo de esa segunda parte, cuando Farías descontó a los seis minutos, después de un envío de Zapata desde la izquierda. El consuelo de Farías sólo le valió para ubicarse como goleador del torneo, con nueve gritos.

Pero el triunfo de Lanús se consolidó en ese primer tiempo inolvidable. El primer gol de Leto inició el camino: el volante recibió una habilitación de Fabbiani desde la derecha, y tocó de derecha ante la falta de reacción de Lux, quien no salió a cortar el centro. Otro volante, Pelletieri, extendió la diferencia con un zurdazo que rozó en Gerlo, y de esa manera descolocó al arquero, que se desplazaba hacia el otro lado. Y antes del final de esa etapa, Pelletieri marcó su segundo gol personal, esta vez aprovechando un rebote en la barrera, luego de un tiro libre ejecutado por Archubi.

En este desarrollo, Montenegro no podía colocarse como el líder de River, y así el equipo sentía la falta de un conductor claro. Igualmente, Lanús también contó con juveniles como Leto, Archubi, Gioda y Aguirre, que demostraron decisión ante un rival con historia. Y mientras Lanús disfruta de este presente, River sumó varias dudas para la etapa de definición, donde la Copa asoma como el gran anhelo.

LANUS-4 Bossio -6 Graieb -6 Gioda -7 Romero -6 Archubi -7 Aguirre -6 Quinteros -6 Pelletieri -7 Leto -7 Biglieri -6 Fabbiani -9 DT: Cabrero

RIVER-1 Lux -5 Ferrari -5 Cáceres -5 Gerlo -5 Mareque -5- Pusineri -4 Lima -5 Zapata -5 Montenegro -5 Higuaín -4 Farías -6 DT: Passarella

Estadio: Lanús.
Arbitro: Carlos Maglio
. Goles: 19m Leto (L), 39 y 44m Pelletieri (L), 51m Farías (R), 73m Fabbiani (L).
Cambios: 60m Barrado (4) por Ferrari (R) y E. Ledesma (-) por Quinteros (L), 68m Ahumada por Zapata (R), 70m Patiño por Pusineri (R), 78m Hoyos por E. Ledesma (L), 83m Cuberas por Leto (L).