El ímpetu con que River salió a la carga, bajo una persistente lluvia y un fuerte viento, duró lo que dura un suspiro. Después el equipo de Leonardo Astrada, que tenía en el cancha a Ariel Ortega, se encontró y no pudo superar la doble muralla que presentó el interino Abel Alves, quien decidió resignar calidad y poblar el mediocampo con volantes de lucha, con lo que resignó profundidad en ataque.

Pasados los primeros veinte minutos, y con apenas el recuerdo de una situación clara de Boca –a los dos minutos, en jugada de tiro de esquina, Rosada tomó un rebote en el punto de penal y definió torpemente al cuerpo de Vega, que atrapó la pelota con los pies–, lo único que quedaba en claro era que ambos equipos antes que arriesgar, se mostraban cautelosos y prácticamente no superaban los tres cuartos de cancha, incluso después de que la lluvia mermó.

River, que tenía en Abelairas su mejor opción, recién inquietó a los 27 minutos, tras una falla del colombiano Bonilla, quien a los 23 años debutó en la primera de Boca, a donde llegó recomendado por su compatriota Jorge Bermúdez. Precisamente, la inclusión de Bonilla en este superclásico fue la última recomendación de Carlos Bianchi como manager del club. Bonilla pifió un centro de Abelairas y le dejó servida la pelota a Ortega, que entró libre por el segundo palo, pero falló frente a Abbondanzieri, que logró despejar su remate al corner.

Boca reaccionó a tiempo. Y pocos minutos después, a los 31, tras un centro perfecto de Mouche, que Viatri conectó con un cabezazo cruzado que descolocó al arquero Vega, consiguió ponerse en ventaja.

A pesar del control que Boca ejercía en el mediocampo, River pudo descontar sobre el final de la primera parte, cuando Funes Mori picó por la derecha, se sacó de encima a Bonilla y metió un derechazo cruzado que muy cerca del palo.

River se adelantó unos metros en la segunda parte y fue un poco más profundo. Sin embargo, fue tras un saque de arco que encontró la igualdad. Funes Mori peinó la pelota en el mediocampo para que Bou controlara, con ayuda de la mano, y en posición de nueve sacara un remate fuerte y cruzado de derecha que Abbondanzieri tocó pero no pudo sacar afuera.

Ortega pudo ampliar con un remate desde afuera del área, con el que sorprendió al arquero de Boca, pero le salió apenas desviado; también Funes Mori, aunque su remate fue débil. Boca respondió con una chilena de Mouche y un remate de Medel, que también pasaron cerca del arco de Vega. Ambos equipos se soltaban más, pero el partido seguía siendo pobre y parejo.

Sobre el final, Boca sufrió la expulsión de Ibarra, por roja directa, tras una falta grosera sobre el recién ingresado Villalva. River se le fue encima: Ortega volvió a tener la victoria en sus pies, pero Abbondanzieri voló y desvió el remate del delantero, y Boca aguantó como pudo hasta el final, poniendo su confianza en la definición por penales.

No le alcanzó. Abelairas, Ludueña y Funes Mori convirtieron, lo mismo que Viatri, pero Vega le atajó a Rosada y a Colazo y Sánchez Miño desvió el suyo, lo mismo que Ferrari. Fue 3-1, copa y otro festejo...

Estadio: Malvinas Argentinas (Mendoza).

Arbitro: Saúl Laverni.

Goles: 31m Viatri (B); 52m Bou (R).

Cambios: 71m Coronel por Ferrero (R), 76m Villalva por Bou (R), 82m Sánchez Miño por Muche (B), 88m Ludueña por Affranchino (R).

Incidencias: 77m expulsado Ibarra (B).