Cuando tiene la posibilidad de ofrecer firmeza, seguridad y convicción, San Lorenzo deja pasar la oportunidad y vuelve a llenarse de dudas. Todo por culpa de ese Falcon, calificativo que el técnico Ramón Díaz le dio a su plantel, al cual suele faltarle una pieza cuando está cerca de posicionarse adelante. El equipo no tuvo la claridad necesaria para superar a Colón y, más allá de que hizo méritos suficientes para quedarse al menos con la igualdad, terminó con cara de preocupación esperando el auxilio. Al menos su público reconoció la insistencia y el esfuerzo para seguir en camino, y despidió a los jugadores en medio de aplausos.

El duelo con los santafesinos fue realmente curioso. El modelo diseñado por Díaz comenzó a puro vértigo, y le imprimió velocidad cada vez que encaraba al área de Pozo. De esa manera fueron apareciendo las oportunidades para convertir: fueron siete. Pero ahí el auto mostró su falla principal: la falta de definición para continuar en el recorrido indicado. Colón resistía los golpes con un motor más desvencijado, pero en su segundo avance se puso en ventaja.

El juvenil Lucas Acosta cabeceó cruzado un envío desde la derecha de Caire, y sorprendió a todo el estadio. La carrocería del Falcon sufrió su segunda abolladura a los 35 minutos, cuando nuevamente Acosta marcó el segundo con otro golpe de cabeza, pero esta vez el centro fue ejecutado por el ex Boca, Damián Díaz. La extensión de la ventaja pareció más entendible, porque los visitantes tomaron el control del juego con los volantes centrales (Ledesma y Prediger) y aprovecharon que San Lorenzo estaba desconcertado por el primer gol.

El chasis del Falcon volvió a sufrir otra vibración a los 13 minutos del segundo tiempo. En ese instante se fue expulsado Cristian Ledesma por una infracción fuerte sobre Juan Manuel Torres, pero San Lorenzo no pudo exhibir en ningún momento que de ahí hasta el final jugó con un hombre de más. Si bien se lanzó en busca del descuento en ese período, con las subidas permanentes del peruano Carmona por la derecha, el desempeño de Pozo fue creciendo y se acentuaron más aquellos problemas para convertir.

El paraguayo Velázquez fue el que tuvo varias chances, pero no pudo acertar en toda la tarde, y lentamente se fue ganando la bronca de los hinchas. Colón ya no contaba con Acosta, el que generaba más peligro en ofensiva, y apostaba a alguna corrida de Fuertes, que evidenciaba el desgaste físico.

El gol para San Lorenzo llegó recién en tiempo de descuento, con un derechazo de Carmona, cuando las ideas y la visibilidad eran escasas. Y así se fue otra oportunidad para quedarse en la delantera de una carrera que empieza a llegar a la mitad. Con estos contratiempos, el Falcon de San Lorenzo no termina de dar las garantías necesarias para saber si podrá seguir en competencia en los tramos decisivos.

Estadio: San Lorenzo.

Arbitro: Germán Delfino.

Goles: 19m y 35m, Acosta (C); 90m Carmona, (SL).

Cambios: 34m, Carmona (6) por M. Giménez (SL); 61m, Bellone por D. Díaz (C); 63m, S. González por Palomino (SL); 66m, G. Pereyra por J. Torres (SL); 75m, Quilez por Acosta (C); 87m, Cano por Fuertes (C).

Incidencia: 58m, expulsado Ledesma (C).