Lun 21.10.2013
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FúTBOL › EN LA CANCHA, GODOY CRUZ Y BOCA EMPATARON PERO...

En Mendoza ganó la locura

El polémico arbitraje de Pedro Argañaraz desembocó en un final increíble, con el gol agónico de la igualdad visitante y las trompadas que se cruzaron los jugadores de uno y otro equipo tras el cierre del encuentro.

Desde Mendoza

Un partido como el fútbol argentino: malo, confuso, con un final escandaloso, con jugadas que dejaron enormes márgenes para la polémica, con algunos referentes tratando de poner un poco de cordura ante tanto desatino organizado, que se prolongará durante toda la semana en el análisis de todo eso que ocurrió en Mendoza en apenas una hora y media sin juego.

Boca empató 2-2 con Godoy Cruz mediante un penal que le hicieron al Burrito Martínez y que ejecutó Chiqui Pérez (y no Riquelme, que estaba en la cancha y eligió no patear), y después de eso se desató la locura de algunos jugadores del equipo mendocino, que se sintieron robados por el árbitro y que se las agarraron además con algunos jugadores de Boca. Por un momento pareció que los 22 futbolistas iban a terminar agarrándose a las trompadas, primero en la cancha y después en los pasillos que conducían a los vestuarios.

El protagonismo principal de ese extraño partido lo tuvo el árbitro Pedro Argañaraz, que cometió muchos errores. Repasemos las jugadas más discutibles.

- En el primer tiempo, a los 16m, hubo un penal –más que penal, penalazo– del Cata Díaz a Obolo. Lo tomó de la camiseta en el área, se la estiró unos cuantos centímetros, en un agarrón un poco más aparatoso de los habituales. El árbitro, que estaba ahí nomás, no vio nada o se hizo el oso.

- Un rato más tarde, Sánchez Miño le puso el cuerpo y la mano abierta a un centro de Castillón. Pareció penal.

- En el medio, entre las dos jugadas, Gigliotti le pegó un manotazo sin pelota a Achucarro. Era expulsión o al menos tarjeta amarilla. Ni una cosa ni la otra.

- A los 59 minutos hubo un cruce de Castellani al Burrito Martínez. Lo tocó, aunque el delantero de Boca ya venía zambulléndose y exageró la caída. No cobró nada.

Un poco más de un cuarto de hora antes del final fue expulsado Lértora, que había sido uno de los mejores jugadores de Godoy Cruz, por doble amarilla. Las dos tarjetas habían sido correctas. Una a favor del árbitro.

Cinco minutos antes del cierre, Cangele, que había entrado por Caruzzo, chocó con un defensor de Godoy Cruz, fuera del área. Pareció que el árbitro cobraba penal y todo Godoy Cruz se le fue encima, especialmente el preparador físico. Lo patotearon feo a Argañaraz, quien finalmente cobró la falta fuera del área, generando la reacción de los jugadores de Boca. Nunca se supo si efectivamente había cobrado en primera instancia el penal y después cambió.

Y sobre la hora hubo otro penal, de Achucarro a Martínez. Clara infracción, que provocó nuevas protestas. Y encendió la mecha de la bomba que explotó al final, cuando varios futbolistas locales se sacaron y algunos de Boca respondieron: Curbelo y Ledesma fueron los que se trompearon al salir de la cancha.

El partido, que con esta suma de episodios pasó a segundo plano, fue bastante parejo. Boca, con una línea de fondo conformada por cuatro marcadores centrales (Caruzzo, Pérez, Burdisso y Daniel Díaz), dio algunas ventajas defensivas, tuvo poco peso en el medio, pero resolvió bien una situación favorable que se le dio en el primer tiempo cuando se juntaron Riquelme, el Cata Díaz, Méndez y Gigliotti, y el grandote centrodelantero bajó la pelota con la derecha y definió bien de zurda.

Godoy Cruz, que en algunos pasajes manejó mejor la pelota, supo aprovechar algunas grietas defensivas rivales y dio vuelta el marcador. Fernández quiso meter un centro atrás y la cruzó al segundo palo en el empate. Y Obolo recogió un doble rebote en los palos de Orion para poner el 2-1. Boca, en desventaja, fue a buscar. Bianchi metió cambios ofensivos, Palermo hizo cambios defensivos tras la expulsión de Lértora y la cancha se inclinó hacia el arco local, hasta que llegó el empate.

Los falsos neutrales celebraron el empate de Boca que, de todos modos, sigue muy lejos de la punta.

El fútbol y la cordura quedaron lejos de todo.


Estadio: Malvinas Argentinas (Mendoza).

Arbitro: Pedro Argañaraz.

Goles: 31m Gigliotti (B); 37m J. Fernández (GC): 47m Obolo (GC); 90m Pérez (B), de penal.

Cambios: 60m Acosta (5) por Méndez (B), 63m Castro por Castillón y Rodríguez por Castellani (GC), 70m Cangele por Caruzzo (B), 77m Zuqui por Ramis (GC).

Incidencia: 72m expulsado Lértora (GC).

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