Belgrano volvió a amargar a River, esta vez con gol polémico sobre el final del partido en el que terminó imponiéndose por 2-1. Con el empate, el equipo de Ramón Díaz alcanzaba a Colón y a San Lorenzo en la punta, pero el árbitro Fernando Echenique convalidó un gol en una jugada en la que la pelota no había terminado de entrar al arco de Barovero.

No se puede negar que el duelo entre Belgrano y River tiene su propia historia. Un descenso doloroso para los hinchas de River, el golpe más duro que un equipo grande puede recibir; de gloria y felicidad para los del conjunto cordobés, tras una serie de Promoción que quedó para siempre marcada a fuego. Y esa historia, esos antecedentes alcanzaron ayer para que el estadio Mario Alberto Kempes se viera colmado por hinchas del Pirata, incluso a pesar del flojo momento que atraviesa el equipo de Ricardo Zielinski.

Sin embargo, esa historia no pareció pesar a los dirigidos por Ramón Díaz, que salieron a la cancha con una gran incentivo: ganar para quedar como únicos punteros del torneo Final. Si bien por momentos parecía alternar el control de la pelota con los locales, River era más preciso con la pelota y la movía por toda la cancha, esperando encontrar la grieta en la resistencia que ofrecían los cordobeses.

Pero la ilusión se desmoronó a los 13 minutos, cuando de contraataque, y tras un centro de Quiroga, el zurdo Velázquez conectó con un cabezazo perfecto que dejó sin respuestas al bueno de Barovero. Ramón Díaz tiró su botella al piso, de bronca, por la pelota perdida por Teo Gutiérrez que dio inicio a la jugada del gol.

El público en el Estadio Olímpico de Córdoba estaba eufórico y le recordaba a River el descenso de 2011; pero tres minutos más tarde, un buen pase de Lanzini y una definición certera del colombiano Gutiérrez, que aprovechó una salida mala y tardía del arquero Olave, y al filo de la jugada peligrosa, les puso fin a las cargadas, anotando la igualdad. Ramón Díaz volvía a sonreír y a dar indicaciones, sobre todo a los volantes, para que éstos no les permitieran subir tan fácil a los mediocampistas piratas.

Rojas y Ledesma eran los encargados de iniciar las jugadas para los visitantes que, si bien manejaban todo el tiempo la pelota, necesitaban un poco más de Carbonero y Lanzini, bien tomados por los volantes rivales. Cuando sus talentos dieron el presente, River estuvo cerca del segundo. Fue a los 36, tras un buen cambio de frente de Gutiérrez para Carbonero, quien habilitó con un pase profundo a Cavenaghi para que éste definiera ante un Olave que le terminó ahogando el grito con dos tapadas, la segunda al Lobo Ledesma en el rebote.

Belgrano mejoró en la segunda parte, porque intentó manejar la pelota y buscó llegar con juego al área de Barovero. Ramón Díaz veía problemas por el lado de Vangioni y preparaba el ingreso de Funes Mori, pero una molestia muscular de Alvarez Balanta, que unos minutos antes había chocado con Barovero y pidió salir, lo obligó a cambiar sobre la marcha. Enseguida, River volvió a estar a tiro de la victoria, con una buena combinación entre Lanzini, Teo y Cavenaghi, que ya bajo una tenue lluvia ensayó una chilena despatarrada en la que le pifió a la pelota.

En los minutos finales, las imprecisiones ganaron terreno y el partido parecía encaminarse a un empate clavado. Pero a los 85 minutos, Zelarayán encontró el hueco para meter un remate que se le escapó a Barovero y que generó la polémica. Es que el arquero la agarró sobre la línea, con una buena parte adentro. Pero mientras todo River protestaba, el árbitro Echenique convalidó el tanto.

Estadio: Mario Alberto Kempes.

Arbitro: Fernando Echenique.

Goles: 13m Velázquez (B), 17m T. Gutiérrez (R), 85m Zelarrayán (B).

Cambios: 39m Kranevitter por Ledesma (R); 58m Funes Mori por Alvarez Balanta (R), 63m Carrera por Rigoni (B), 73m Menseguez por Cavenaghi (R), 77m Márquez por Velázquez (B).