“Se deberían haber jugado los 45 minutos restantes”, dijo el presidente de Boca, Daniel Angelici, desde Asunción, al enterarse del fallo de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) que descalificaba de la actual Copa Libertadores a la institución que preside. Si bien la sanción no genera una “exclusión de futuras competiciones”, aunque sí “cuatro partidos como local” a puertas cerradas en torneos internacionales, sumados a otros cuatro encuentros sin su público en condición de visitante, además de una multa de 200.000 dólares, la decisión de la Conmebol no dejó conforme al equipo de la Ribera, que apelará la medida en busca de agotar todos los recursos posibles para que se jueguen los 45 minutos que restan ante River. Así lo hizo saber Eduardo Calezzo, el abogado brasileño que trabaja para revertir ese fallo. “Una vez que tengamos la decisión final de la Conmebol, hasta podemos apelar a la FIFA”, había expresado.

“No es una defensa fácil. Esas imágenes fueron fuertes y recorrieron el mundo. Boca era consciente de que se le vendría una sanción pesada. Había una presión muy grande para que así fuera cuando llegamos a Asunción”, agregó. El letrado opinó que “Boca es un gran club, un gran equipo, con una gran dirigencia y una gran hinchada”, además de señalar que van “a presentar un nuevo recurso aunque sabemos que las chances son cada vez menores. No quedamos contentos con el fallo. Vamos a tratar de colocar nuevamente a Boca en la Libertadores. Vamos a luchar para que Boca juegue los 45 minutos restantes contra River”, puntualizó. También expuso que podrán trabajar “en paralelo” con la disputa de los cuartos de final del certamen que ya comienzan esta misma semana.

Para conseguir una disminución en la sanción, Calezzo citó el antecedente acontecido en febrero de 2013, en Oruro, Bolivia, donde un hincha de 14 años de San José murió a causa de una bengala lanzada por los hinchas del Corinthians. Aquel episodio también se resolvió con suspensión de público local y visitante para la parcialidad brasileña. “Se identificaron a algunos agresores y se demostró que el club hizo todo lo posible para cooperar con la investigación de lo ocurrido. Había 1040 policías en el estadio y en sus alrededores, además de seguridad privada. Como sabemos, siempre hay un irresponsable y no sólo pasa en Brasil”, recordó.

Daniel Osvaldo también discrepó con el fallo. “Y la ilusión de mi sobrino también se la robaron cinco gordos de traje en un escritorio. ¡Mafiosos! Aguante Boca, ¡caretas!”, publicó el jugador en su cuenta de Twitter. Junto a este mensaje, el delantero italoargentino adjuntó una foto con su sobrino, que cumplía años. Para Osvaldo no era un torneo más, sino la gran posibilidad de cumplir el sueño de ganar la Libertadores con el club de sus amores, luego de las arduas negociaciones que se habían realizado para que el Southampton, de Inglaterra, club dueño de su pase, y el Inter, de Milán, con el que tenía vínculo hasta junio, accedieran a prestarlo. Con este panorama, en poco más de un mes el atacante volvería a Europa.

El plantel de Boca regresará mañana a los entrenamientos en Casa Amarilla, de cara a lo que será el partido del domingo 24 de mayo contra Aldosivi. Para ese encuentro, se espera que en la semana haya una sanción de parte del Comité de Seguridad por la agresión a los jugadores de River, lo que haría que sea local ante los marplatenses en otro escenario. Los jugadores habían practicado el sábado por la tarde, con la esperanza de recibir la confirmación de que podrían continuar su participación en la Copa. Pero al enterarse de que no era así, el técnico los liberó hasta el martes.

El que también dio su testimonio, aunque para avalar la decisión de la Conmebol, fue Roberto Cabañas, ex delantero de Boca y de la selección paraguaya. “Que me perdonen los bosteros pero estoy totalmente de acuerdo con la eliminación de Boca. Los que cometieron ese atropello, con su mente enfermiza, pensaron que así podían cambiar el rumbo del partido porque el equipo en sí no respondía. Es muy triste lo que pasó”, opinó. “Lo sucedido es la prueba concreta de que la delincuencia le gana por goleada al fútbol y a la justicia en la Argentina”, concluyó Cabañas, quien actualmente se desempeña como comentarista deportivo de la radio 970 AM en Paraguay.