- El entrenador de Boca, Alfio Basile, asesorará al entrenador del seleccionado ecuatoriano de fútbol, Luis Suárez, con vistas al próximo Mundial de Alemania. El técnico colombiano, quien presenció la victoria boquense frente a Newell’s, admitió: “No quiero ir ‘ciego’ al Mundial y por eso vine a la Argentina para contactarme con técnicos que tengan experiencias en Copas del Mundo”. Suárez tiene pensado entrevistarse, además, con los entrenadores campeones del mundo César Menotti (Argentina ’78) y Carlos Bilardo (México ’86). En Estados Unidos ’94, la Selección de Basile fue eliminada en octavos de final por Rumania.
- El delantero paraguayo del Bayern Munich Roque Santa Cruz sufrió una lesión de ligamento cruzado en la rodilla derecha y deberá operarse y esperar al menos cinco meses para volver a jugar. “Es una catástrofe para Roque”, comentó el entrenador de conjunto bávaro, Felix Magath. “Estaba en excelente forma y había anotado muchos goles importantes”, agregó. Santa Cruz es una de las principales figuras del seleccionado de su país, que disputará el Mundial de Alemania.
- El volante Rubén Olivera, de Juventus, sufrió un desgarro que lo dejará fuera del partido repechaje que el seleccionado uruguayo disputará el 12 de noviembre con Australia por un lugar en el Mundial de Alemania 2006. Para ese partido fueron convocados por el seleccionador Jorge Fossati unos 27 jugadores que juegan en el exterior, entre ellos Diego Forlán (Villarreal), Paolo Montero (San Lorenzo), Pablo García (Real Madrid), Alvaro Recoba (Inter) y Sebastián Abreu (Dorados, México), autor del gol del conjunto celeste frente a México, en la derrota por 3-1 en el amistoso ante México, que dirige el argentino Ricardo Lavolpe.
- La Federación Australiana de Fútbol (FFA) respaldó las medidas de seguridad dispuestas en Montevideo para el encuentro de ida del repechaje con Uruguay y confirmó la nómina de jugadores que disputarán el encuentro. “Estamos satisfechos con las medidas de seguridad”, comentó el director ejecutivo de la FFA, John O’Neill, tras una serie de reuniones y una carta de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) comprometiéndose a velar por la seguridad de la delegación australiana.