Sebastián Simonet, central del seleccionado masculino de handball, se mostró dolido por la derrota 25-19 ante Dinamarca, en el debut en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, y resaltó que el equipo no debe salirse de los partidos o dejarse influir negativamente por los fallos arbitrales.

“Empezamos muy bien, llevando el peso del partido y aguantando la chapa de Dinamarca. Después, en los primeros cinco minutos del segundo tiempo, entre desconcentraciones nuestras y algunos fallos que no entendimos bien, nos fuimos del partido”, explicó a Télam el mayor de los hermanos Simonet, con lágrimas en los ojos. Y agregó: “Nos seguimos enojando con eso y tenemos que aprender a no dejarnos llevar por el ambiente. Fueron cinco o diez minutos en los que nos desconcentramos por algunos fallos que no entendimos y eso nos mató”.

Simonet reconoció que “con esta clase de equipos se pierden tres pelotas y son goles en contra”, situaciones que ellos saben aprovechar y que “después conocen como llevar para liquidar el partido”. “Nos estancamos en ataque. Empezamos a jugar uno contra uno y buscar cosas forzadas que no nos dan resultado. Cuando actuamos de manera colectiva y abriendo la cancha fue cuando mejor nos fue”, analizó el jugador del Ademar León español, al tiempo que agregó sentirse bien la lesión en el hombro derecho que sufrió ante Brasil en el Panamericano de Tecnópolis hace dos meses.

“Estoy bien. Estoy haciendo un esfuerzo muy grande, porque me duele. Estoy trabajando mucho con hielo y kinesiología. Hay días que estoy mejor y otros no tanto”, contó.

Por su parte, Diego Simonet, quien se quedó fuera de la lista por una grave lesión en los ligamentos de la rodilla derecha, vio el partido desde la platea y manifestó: “Fue una mezcla de sentimientos. Ver a mis hermanos jugando y no poder estar. Jugaron muy bien los chicos”.

“No lo puedo disfrutar desde afuera. Es imposible. Sufro mucho”, agregó.

Por el lado de Dinamarca, el lateral Mikkel Hansen, comentó: “Hemos jugado más o menos bien. Argentina es un gran equipo. En la primera parte no actuamos muy bien en ataque y, por eso, no pudimos marcar. En la segunda parte metimos dos o tres goles de contraataque y después el partido se volvió nuestro”.