SAN ANTONIO SPURS DERROTO 88-78 A LOS LAKERS
Ya puso primera
El actual campeón ganó en el primer juego de la semifinal del Oeste con una buena tarea de Emanuel Ginóbili, que aportó 11 puntos y tomó 6 rebotes.
Los especialistas la consideran una final anticipada. Por eso, el triunfo que San Antonio Spurs consiguió ayer sobre Los Angeles Lakers en el SBC Center en el primer juego de la serie semifinal de la Conferencia Oeste resulta fundamental de cara al objetivo del equipo texano de repetir el título. El actual campeón se impuso 88-78 con una buena actuación de Emanuel Ginóbili, que finalizó con 11 puntos (2 de 5 triples, 2 de 5 dobles y 1 de 1 en libres), 6 rebotes, 2 asistencias y 2 robos en los 31 minutos que permaneció en la cancha. El triunfo de San Antonio estuvo sustentado en la gran actuación de Tim Duncan, autor de 30 puntos, y del francés Tony Parker, que logró 20 unidades y entregó 9 asistencias, además de una excelente labor defensiva en el último cuarto. Para los visitantes, el mejor hombre fue Kobe Bryant.
El comienzo del campeón no fue bueno. En ese pasaje no tuvo efectividad en los lanzamientos, lo que determinó que Los Angeles sacara 7 puntos de ventaja (12-5). Un mayor porcentaje de acierto en los tiros y el ingreso al juego de Ginóbili posibilitaron que el equipo que dirige Gregg Popovich diera vuelta el marcador y cerrara el primer parcial con una ventaja de 7 unidades (21-14). En ese pasaje, el bahiense anotó el único triple que intentó, capturó dos rebotes y le robó una pelota a Karl Malone. La floja tarea del turco Hidayet Turkoglu, que falló los seis tiros que lanzó en la noche, le dio al argentino la posibilidad de jugar más minutos que los que venía promediando en la serie ante Memphis.
San Antonio mantuvo su predominio en el segundo cuarto, más allá de que la preponderancia de Ginóbili mermó en ese pasaje. Lo mejor del campeón era su defensa, que apenas permitió 33 puntos de un equipo con muchas variantes de ataque. Claro que salvo Bryant (13 puntos) y Shaquille O’Neal (10), el resto no encontró espacios para convertir. El tercer parcial mostró un momento de desconcierto de San Antonio, que dilapidó la ventaja y llegó a perder por seis unidades cuando promediaba el cuarto. Por eso, los tres puntos abajo con que arrancó el último cuarto fueron un negocio redondo para el campeón.
Allí se vivió un momento clave. Cuando iban punto a punto, a Bryant le cobraron una falta técnica, que Ginóbili convirtió para igualar el juego en 69. Y partir de ese instante, los Spurs colocaron un parcial 14-2, con una bandeja, una volcada y dos asistencias del argentino, que sirvieron para liquidar el juego. Fue clave la tarea defensiva de conjunto de los texanos, que no permitieron tiros de campo de su rival durante seis minutos. Ya con el partido asegurado, el entrenador Popovich sacó al argentino a un minuto del cierre, para que el SBC Center lo aplaudiera de pie. Es que nuevamente resultó importante para que los Spurs superaran a los Lakers. Y esos triunfos, se sabe, valen doble para los hinchas. Ahora, la serie seguirá el próximo miércoles, nuevamente en San Antonio. La bronca por la derrota y la floja actuación de sus dirigidos motivó que el entrenador decidiera que sus jugadores volvieran a Los Angeles, para reafirmar conceptos y para tratar de olvidar la noche de ayer.