Gran temporada del Mago. Increíble, casi. Guillermo Coria, tras haber obtenido hace una semana el título en Stuttgart, ayer se adjudicó el torneo de Kitzbuehel, Australia, tras derrotar en la final al chileno Nicolás Massú por un contundente 6-1, 6-4 y 6-2. Con esta victoria, Coria se convirtió en el primer tenista del circuito que en lo que va del año consigue ganar dos torneos consecutivos, a los que hay que sumar el título de Hamburgo, su primer Masters Series. La mira del argentino –séptimo en el ranking mundial de la ATP y tercero en el ranking de la Carrera de Campeones, tras desplazar al estadounidense Andre Agassi– apunta ahora a dos objetivos: por un lado, algo que no parece para nada improbable, terminar la temporada entre los primeros ocho del mundo para garantizar su presencia en el Masters; por otro –y antes que nada– ser convocado por el capitán del equipo argentino de la Copa Davis, Gustavo Luza, para disputar en septiembre las semifinales frente a España.
Este es un año perfecto para Coria, a juzgar por los logros obtenidos en los distintos torneos en los que participó, ya que además de los tres títulos obtenidos llegó a los octavos de final en el Abierto de Australia (perdió contra Agassi); fue finalista en Buenos Aires (el título se lo adjudicó el español Carlos Moyá) y también en Montecarlo (donde cayó ante el español Juan Carlos Ferrero); semifinalista en Roland Garros (donde se impuso el holandés Martin Verkerk). Sólo fracasó en Wimbledon.
“Este año he tenido resultados espectaculares. Pero lo realmente importante es no haberme relajado para obtener estos resultados. Estoy con confianza y mi objetivo es mantener el nivel. Siempre se sueña con ganar dos torneos seguidos y eso es lo que he hecho”, manifestó el Mago tras el triunfo en Austria.
En Kitzbuehel, Coria apenas sufrió sobresaltos en la final ante Massú, quien había derrotado en semifinales a un Mariano Zabaleta que venía para más. El santafesino, desde el inicio del encuentro, impuso su mejor juego y fue incuestionablemente superior a su rival durante todo el primer set. El chileno recién logró reaccionar en el segundo juego, pero nunca consiguió quebrarle el saque a Coria, que continuó su racha y gran despliegue en el tercer set.
“El marcador dice que fue un partido fácil, pero el segundo set estuvo más parejo. Tuve un juego muy sólido y ahora disfruto porque pude mantener el nivel de los últimos torneos”, explicó Coria al finalizar el encuentro.
Pero ni los tres títulos obtenidos en el año –igualó el record que Guillermo Pérez Roldán tenía desde 1987 en ser el último argentino en ganar tres títulos en una misma temporada, y quedó a un solo título de Martín Jaite, el último argentino en ganar 4 títulos en el mismo año (1989)– ni el lugar de privilegio que ocupa dentro de la elite mundial del tenis pueden eclipsar sus deseos de ser convocado por el equipo argentino para disputar las semifinales de la Copa Davis, que se disputarán entre el 19 y 21 de septiembre en España. “Vivo con ansiedad la Copa Davis. En realidad, todos los tenistas argentinos pensamos en esa cita contra España. Espero con impaciencia la convocatoria de nuestro capitán para ver si estoy incluido”, manifestó el Mago.
“Los resultados me ayudan cada día más para estar en el equipo de la Davis, pero en la Argentina hay un gran nivel y hasta que el capitán no me nombre no me voy a quedar tranquilo”, agregó Coria, quien reconoció que en el encuentro frente a los españoles no hay favoritos: “Va a ser duro. Seguramente somos los dos países con los mejores jugadores del mundo en polvo de ladrillo. No hay favorito claro y los dos tenemos chances”.
A pesar de los éxitos deportivos, Coria volvió a mencionar el mal trago que le significó hace dos años el doping positivo por nandrolona. “Estoy disfrutando el doble por todo lo mal que lo he pasado. Estoy con más hambre de triunfo que nunca. Ojalá siga la racha –lleva diez partidos seguidos sin perder un solo set–. Ahora valoro y disfruto todo mucho más”, reconoció. Por último, dedicó todas sus victorias a los argentinos: “Dedico todos los éxitos a mi país, por toda la fe que ha depositadosiempre en mí, y especialmente a mi familia. Perdieron todo en la crisis argentina y no me olvido de ellos”.