Pekerman intentó cerrar la polémica que se genera cada vez que alguno de los futbolistas manifiesta su disgusto por no integrar una de sus convocatorias. El técnico pidió que haya respeto “de todos para todos”, pero aclaró que nunca se enojará con un jugador que pida un lugar en la Selección, más allá de que expresó que cada uno debe ser responsable en la manera en que lo dice.
“Cuando uno habla públicamente debe saber que tiene un compromiso con lo que está diciendo, porque en lo que está diciendo hay otros compañeros, otros jugadores y saben que acá pueden venir y salir en cualquier momento”, señaló el entrenador, que dejó en claro cómo son las reglas del juego. “Acá no hay contratos como en un club. La pertenencia es mientras esté acá, venga a jugar y esté con el grupo. Cada partido es una nueva convocatoria y puede o no estar, entonces eso merece un respeto de todos para todos.”
Durante algunas semanas, en las primeras convocatorias del año, Juan Sebastián Verón y Andrés D’Alessandro hicieron públicas sus quejas porque Pekerman no los llamaba para integrar el plantel argentino. “Cada uno debe ser responsable de lo que diga. Valoro que el jugador quiera estar y si lo quiere decir también es válido que lo diga”, afirmó el técnico, que aclaró su postura al respecto y puso énfasis en la forma y no tanto en el contenido de esas declaraciones.