“Que vamos a salir campeones...” La despedida del equipo de parte de los hinchas de Boca tras la victoria ante Quilmes dejó en claro la sensación que quedó de cara al tramo decisivo del Apertura. Cuatro puntos sobre Estudiantes y siete sobre River cuando sólo restan doce en disputa, más un fixture no demasiado complicado, se conjugan para que la suposición de los hinchas tenga fundamento. La seguidilla de partidos que tanto preocupaba a Ricardo La Volpe se saldó con solvencia y dejó a Boca al borde del tricampeonato.

Hace tres semanas, cuando se suspendió Boca-Racing, el equipo de La Volpe quedó dos puntos debajo de River, aunque debía recuperar los dos encuentros suspendidos. En quince días tenía que afrontar una racha de cinco compromisos consecutivos, lo que levantó la protesta del entrenador, que calificó como clave en la definición del torneo cómo superaría su equipo ese tramo del certamen. Y los números le dieron la razón.

Boca pasó la seguidilla de partidos de manera casi perfecta. Apenas dejó dos puntos en su visita con Racing. En los otros compromisos superó 2-1 a Argentinos, por el mismo marcador a Arsenal, dio vuelta el polémico juego ante Gimnasia y ayer cerró la racha con el triunfo ante Quilmes. Los trece puntos que sumó en ese segmento se contraponen con los apenas cuatro que logró River, producto de su empate ante Independiente, la goleada ante San Lorenzo y la caída ante Estudiantes. Precisamente, el conjunto platense es el único que pudo seguirle el ritmo, a partir de sus tres triunfos, que extendieron a ocho la racha exitosa del equipo de Simeone.

El futuro para Boca tampoco muestra un panorama demasiado exigente. En la próxima jornada debe visitar en Jujuy a Gimnasia, luego recibe a Colón, en la penúltima fecha viajará a Córdoba para jugar ante Belgrano y cerrará el torneo en la Bombonera ante Lanús. Un programa que aparenta ser algo más sencillo que el de Estudiantes, que debe viajar el sábado a Rosario para enfrentarse a Newell’s, después recibirá a Racing, visitará a Argentinos y cerrará en el estadio Ciudad de La Plata ante Arsenal.

Lo concreto es que la campaña del Boca de Basile-La Volpe es irreprochable desde los números, con porcentajes que ya le podrían haber dado el título en otro certamen. Lleva 38 unidades en 15 partidos, con el 84,44 por ciento de los puntos. El Newell’s de Gallego fue campeón en el Apertura 2004 con 36 puntos, mientras que el Vélez de Russo lo consiguió con 39 en el Clausura 2005. Hasta el Boca de Bianchi, en el Apertura 2003, tampoco llegó a las 40 unidades. Si ahora gana los cuatro partidos que le resta, Boca llegará a los 50 puntos, una marca inédita en los torneos cortos. Hasta el momento, la mejor marca le corresponde al San Lorenzo de Manuel Pellegrini, que en el 2001 se consagró en el Clausura con 47 puntos, tras ganar los últimos once partidos. Por ahora, a Boca le cierran los números.