La situación de Américo Gallego en Independiente pudo haber tenido un punto de inflexión ayer, luego del encuentro jugado en La Paternal. Si bien el presidente Julio Comparada, que estuvo en el estadio de Argentinos, había destacado que en el transcurso de esta semana se reuniría con el entrenador para renovar su vínculo, después de la derrota ante el nuevo líder hubo varios directivos que mostraron mucho fastidio con el técnico. En primer lugar habrían cuestionado los cambios que decidió, que terminaron retrasando al equipo y perdiendo el protagonismo que tenían hasta ese momento. Pero el problema con Gallego también tiene que ver con sus declaraciones luego de la derrota ante Boca, donde señaló que el plantel necesita “jugadores de jerarquía”, minimizando a un conjunto que tuvo oportunidad de ganar el título hasta ayer. Para colmo, en el caso de continuar, Gallego solicitaría futbolistas importantes, lo que significaría una erogación económica que el club no está en condiciones de realizar. El que también tiene que definir su situación es el manager César Luis Menotti, y nadie asegura que siga en ese lugar.