“Vélez no reservó ningún futbolista, preguntamos uno por uno quién podía jugar y respondieron. El equipo que entró a la cancha era lo mejor que teníamos”, aseguró el entrenador del equipo de Liniers, Ricardo Gareca, tras la derrota 2-1 frente a Tigre. “Era un partido difícil, el segundo gol de Tigre fue un golpe anímico para el equipo, porque lo habíamos empatado hacía muy poco y no pudimos recuperarnos”, puntualizó. Hoy, Godoy Cruz puede igualar la línea de Vélez en la cima del Clausura cuando reciba en Mendoza a Gimnasia. Sin embargo, Gareca es optimista en cuanto a las posibilidades de obtener el título: “Sigue dependiendo de nosotros mismos. Es cierto que si Godoy Cruz y Lanús ganan, se nos van a acercar; pero de todas formas dependerá de lo que podamos hacer nosotros dentro de la cancha”.