Con el empate, Boca completó su peor racha sin triunfos en el profesionalismo: once partidos (casi 100 días) sin ganar. Nunca antes Carlos Bianchi había padecido una serie sin triunfos tan extensa, y acumula tres meses con un ciclo de varios empates en la Bombonera. Sumó igualdades contra Argentinos, Lanús, Belgrano y River; derrotas con All Boys y San Martín de San Juan como visitante; y empates ante Tigre, Atlético Rafaela e Independiente, también fuera de su estadio.

En el regreso de Juan Román Riquelme, Boca cayó ante Unión en su propio estadio. Ni en Vélez Sarsfield ni en su paso anterior por el club de la Ribera a Bianchi le tocó atravesar un ciclo igual.

En 1957, Boca estuvo diez fechas sin ganar desde la sexta (el 9 de junio) a la 17ª (el 1º de septiembre), es decir 73 días sin conocer la victoria. Ese año se fueron con el pase libre dos columnas de casi toda la década, Juan Carlos Colman y Natalio Pescia. El primero firmó para Atlanta, que venía de Primera B, y la gran baja resultó la ida del exquisito delantero Antonio Valentín Angelillo al Inter de Italia. Se fue por casi 6 millones de pesos.

El equipo lo dirigía Mario Fortunato, ex jugador del club, y promediando el torneo tomó la conducción Juan Evaristo, ex defensor del primer campeón del profesionalismo (1931). La racha se cortó con una victoria 3-1 sobre Gimnasia en el Bosque platense.