- Ezequiel Cerruti fue incontenible para la defensa de Gimnasia. Habilitó con precisión a Carrillo para el segundo gol y realizó una gran jugada individual que derivó en un penal, que él mismo cambió por gol.

- Hubo mucha diferencia en las respuestas de los arqueros. Mientras que Hilario Navarro evitó un golazo de chilena y mostró firmeza, Yair Bonnin falló en la salida del primer gol y no tapó con suficiencia en el segundo.

- La serenidad y la experiencia de Estudiantes, que viene con confianza por sus últimos resultados positivos en el clásico, en el torneo y en la Copa, contra la ingenuidad de Gimnasia, que no supo aprovechar su momento.