Ayer se inauguró el Salón Diario La Capital, un evento de diseño que ya trasciende las fronteras de su ciudad, Rosario, imponiéndose en el calendario nacional. Básicamente a través de una trayectoria que se va consolidando con un mayor número de inscriptos cada año, la unión que hace a la fuerza de múltiples actores que se juntaron para una apuesta en común –-Fundación del Diario La Capital, el Museo Castagnino-macro y la tienda Puro Diseño y nuevas actividades–. Encuentro pujante si los hay, que siempre trata de sorprender. Y si no, basta preguntar: ¿Quién hizo nevar en Rosario en julio del 2007 cuando nevó en todo el país menos en esa ciudad? “El Salón Diario La Capital”, por supuesto, ya que con cada inauguración redoblan la apuesta en una escena cada día más efervescente.

Pasen y vean

Iluminación, mobiliario, objetos, accesorios de moda y de mesa, joyería y juguetes son algunas de las categorías del certamen de diseño que da pie a esta octava muestra. Los participantes, tanto profesionales del diseño como artistas y estudiantes de todo el país, que fueron evaluados bajo criterios que apelan a la innovación, entendida como la exploración e identificación en el uso de materiales nuevos o tradicionales asociados a nuevas concepciones y formas, por un jurado de lujo –Dolores Navarro Ocampo, creadora de la tienda PuroDiseño; Mauro Guzmán, encargado de las tiendas Castagnino+macro; Arturo Grimaldi y Roberto Echen, director artístico de Museo Castagnino+macro, Anabella Rondina, coordinadora Gestión de Diseño del CMD; Raquel Ariza, directora del Programa Prodiseño del INTI y el diseñador Alejandro Sarmiento–.

Ellos fueron los encargados de elegir la treintena de trabajos que estarán expuestos hasta el 22 de junio en las salas del Museo Municipal Juan B. Castagnino y entre los que se entregará un primer premio adquisición de 12 mil pesos y siete menciones no adquisición de 2 mil pesos cada una. Pero lo más interesante es que las tiendas de ambos museos y PuroDiseño podrán seleccionar a algunos de los ganadores o finalistas para acordar la comercialización de sus diseños.

¿Entre los que dan el presente? Varias marcas registradas del diseño rosarino como Attenti’l Cane, de María Gabriela Di Franco, en la categoría lúdico-infantil. Esta vez con un perrito realizado en nylon cristal, paño polar, modal, canutillos, vellón siliconado, wata y alambre apto para customizarlo por los pequeños usuarios. “Un perro de nylon transparente que muestra su autonomía tal cual es y permite personalizarlo con marcadores si su dueño así lo quisiese. Además trae su traje reversible para que lo vistan de forma diferente”, resume su autora, en una clara apuesta por lo hecho a mano y un juego que apela a la niñez de antes.

En el rubro mobiliario, Diego Weisse y Darío Polaco con su Boggie Lounge Chair, un asiento de exterior en plástico reforzado, fibra de vidrio y acabado pulido brillante. “Boogie está orientada al mercado de mobiliario para exteriores de alta gama. Ideal para salones lounge de hoteles boutique y bares o incluso para salas de descanso en oficinas que apuestan a la informalidad. En exteriores, como terrazas, porches o decks de piscinas, brinda una solución perfecta cuando lo que se busca es funcionalidad y sofisticación”, detallan. Y la sinuosa silla de caño estructural metálico redondo y manguera de alta presión Espiral de Matías Zaeta. “La silla está construida a partir de diferentes anillos o diámetros que pueden variar según las exigencias y así obtener diferentes modelos que pueden personalizarse ergonómicamente. Es una sola línea curva-ascendente. Se pueden forrar en plástico reforzado (resinas poliéster, fibra de vidrio, fibra de carbono, cubiertas con hilados, mangueras de goma)”, aclara Zaeta, entre otros.

Mientras que en el segmento accesorios de escritorio se destaca Yamila Garab con su Pencil Doc, una línea de lápices en aluminio anodizado. “Un sistema que posibilita el uso de lápiz-lápiz, lápiz-goma, lápiz-difumino y lápiz-crayon. Básicamente, es un producto que resignifica el lápiz común, lo realza y categoriza. A su vez, su mecanismo permite sujetar lápices, crayones, goma en barra o goma en formato de lápiz, ya que se pensó la sujeción de éstos desde su estandarización para luego poder ser repuestos sin dificultad y brindar al usuario mayores beneficios. Es decir, mediante este producto se articulan nuevas funciones para el dibujo, aún no combinadas”, cuenta su autora.

Por último, en la categoría joyería contemporánea, una de las más celebradas en todas las ediciones del certamen, justamente porque es una disciplina de mucho virtuosismo en nuestro país, esta vez figura entre las seleccionadas la línea de collares reciclados de recortes de plástico acerado, alpaca y bronce, telas de algodón o lycra, y portaalfileres de la línea Refeliz de Tamara Lisenberg.

En plus

El salón presenta, como en años anteriores, varias muestras anexas, que esta vez hacen foco en el detrás de escena de la producción. ¿La vedette? Artistas en industrias, un proyecto de Castagnino+macro coordinado por Eugenia Calvo, donde los artistas hacen una residencia en industrias y generan productos desde esa lógica, lo que les permite, entre otras cosas, el acceso a herramientas de producción con las que en general no cuentan. Tal el caso de la obra de Norma Rojas y las del grupo Trulala, de Claudia del Río y Carlos Herrera que realizaron sus piezas en la cristalería San Carlos.