En una esquina de Floresta que todavía muestra más cielo que cemento se alza esta linda casa afrancesada, de buena reja y piel de cemento de París. Tiene, año más o menos, un siglo de agraciar el barrio y para cuando estas líneas se publiquen puede ya ser un recuerdo. Es que la casa está tapiada y los vecinos se ven venir una prolija destrucción a maza y barreta. La casa hace esquina con Emilio Lamarca y tiene la dirección legal de Bogotá 3488, aunque la única entrada, sobre la ochava, luce la placa con el número 3498. Es la primera de las confusiones sobre este lugar. Resulta que la casa está de la vereda de enfrente del Area de Protección Histórica de Floresta, con lo que es demolible en principio. Pero en el catálogo preventivo de la Ciudad se la reconoce como un edificio singular y se le concede el grado de protección cautelar. Si es demolida, significará que otra vez se cargan un edificio sin que el gobierno porteño se dé por enterado. O tal vez que el subsecretario de Planeamiento, Héctor Lostri, firmó otra de sus resoluciones sacando de catálogo un predio. Estas resoluciones son tan evanescentes desde lo legal, que Lostri ya tiene una denuncia por incumplimiento de sus deberes de funcionario público y se ganó un proyecto de ley prohibiéndole firmarlos que lo califica con una dureza inusual en este tipo de escrito. Habrá que ver si la linda casa llega al lunes o Buenos Aires pierde otra pieza de su patrimonio edificado.