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Del 18 al 20 de octubre pasados se llevó a cabo en el Centro Metropolitano de Diseño, el Festival Internacional de Diseño de Buenos Aires 2013, que tuvo además de un destacado ciclo de conferencias y actividades, la muestra Diseño Argentino. A lo largo del tiempo, a lo ancho del mapa, curada por Wustavo Quiroga y Frank Memelsdorff.

Reconocido custodio de nuestros acervos materiales, esta vez Quiroga apeló a la pluma de Memelsdorff (experto en branding y gestión del diseño y autor de varios libros como Diseño: imagen y empresa e Identidad Corporativa en el sector público), además de la puesta visual del estudio Munda y del diseño expositivo y montaje de los arquitectos Lucas Gilardi y Gustavo Diéguez de A77.

La exposición retrata casos de gráfica, producto y textil mediante ejemplos históricos y actuales provenientes de los principales nodos productivos del país. “Lo que se selecciona en esta ocasión es lo nuevo, lo menos nuevo y lo nada nuevo, cubriendo siete décadas, rastreando diseños a lo largo de toda la geografía argentina. Un ejemplo: la innovación en diseño del televisor con pie de 2008 de Roberto Nápoli y Emil Taboada. Comparado con el último grito de los televisores inteligentes, hoy ya no impresionan, pero de eso trata esta muestra: del continuado aporte del diseño a la sociedad, década tras década. La segunda exigencia fue satisfacer a dos públicos. Por un lado, los “legos” (los que siempre quisieron saber de qué trata el diseño y no se animaban a preguntar) y por el otro, no aburrir –sino interesar– también a los profesionales que se la saben todas. Un tercer objetivo es ampliar el panorama conocido sobre el diseño nacional con múltiples aportes realizados en los principales territorios productivos del país. De esta manera se desplaza el relato centralista que hasta ahora se ha instaurado como oficial”, detallan.

¿Algunos otros destaques por Quiroga? “La inclusión del trabajo de Alejandro Malofiej, una figura desconocida en el mundo del diseño, aunque durante la década del ’80 realizara varias cartografías e infografías en diarios y revistas que ayudaban a explicar de manera visual algunos sucesos bélicos, entre ellos, la guerra de Malvinas. De alguna manera, este periodismo gráfico dio lugar a uno de los grandes creadores de la infografía moderna, reconocido a nivel mundial y casi anónimo en nuestro país. Por ejemplo, en España existen los Premios Malofiej, de reputación internacional, abocados al periodismo gráfico”, señala. Y continúa: “Otra perlita que me gusta destacar porque habla mucho del proceso de investigación y de la actividad variable que hay en el proceso de una exposición de este tipo, es cómo la historia es un relato que se construye a diario. Cada vez que una fuente importante aparece puede cambiar el sentido de la historia o reescribirse. Durante el trabajo de la exposición, muy cercano a la inauguración del festival, Ronald Shakespear observa los créditos de la marca de Fate y nos alerta que el diseño no era de Carlos Alberto Méndez Mosquera, sino de Rubén Fontana. Este giro inesperado nos permitió repasar la historia de una gran marca que hasta ahora sólo se daba a conocer a través del director de la agencia Cícero Publicidad. Resultó que el isotipo era un diseño de Lala Méndez Mosquera y el logotipo era un trabajo de Fontana quien por entonces trabajaba para esta agencia. Además se afirmó su año de creación en 1964”.

Por otra parte, en el rubro textil, Quiroga resalta el trabajo del diseñador Mariano Yoraillh en la firma de indumentaria de street wear Rethink. “Este proyecto nació hace una década como la primera music brand del país. Se caracteriza por un trabajo de identidad global sobre las prendas, la comunicación y la ambientación de los locales. Con desarrollos técnicos muy exquisitos de sobre impresiones, moldería y combinación de textiles. Este proyecto, que fue sobrellevando las situaciones económicas del país, tuvo en algunos momentos una cadena de locales que funcionaron en Capital Federal, abrió un store exclusivo en España y exportó a varios países, actualmente están pensando un relanzamiento de la firma acompañada por actividades que engloban el concepto musical.”

Por último, tener los trabajos de José de San Martín que fue de alguna manera homenajeado en esta exposición, ya que falleció en un accidente hace muy poco. “El era un profesional muy talentoso y productivo abocado principalmente a la realización de vehículos como bicicletas y motos, aunque este último tiempo también desarrolló mobiliario de oficinas”, destaca.