De la charla que Alejandro Cohn, arquitecto argentino radicado en Brisbane, Australia, desde la década de los noventa, dio en la SCA el miércoles pasado, se pueden rescatar varios aspectos interesantes. Sobre todo surge una lógica interpolación con la forma de encarar los proyectos urbanos en Australia.

Alejandro Cohn es profesor de la Queensland University of Technology y miembro de la consultoría multidisciplinar Grupo Place. En su visita mostró su trabajo actual en el que, luego de estudios de ecólogos, ingenieros, arquitectos, paisajistas y demás especialistas, están materializando en Brisbane una red de transportes vehiculares llamados Bus-way. La idea no es singular en el mundo, pero tiene mucho de originalidad y de vanguardia.

Brisbane tiene, como toda gran ciudad, problemas de tránsito vehicular, la solución adoptada fue la construcción de vías rápidas e individuales para los ómnibus de la ciudad. El resultado: el radio de gente que toman el ómnibus supera a la incidencia de los trenes y con dos carriles exclusivos para los ómnibus se suplen siete carriles de una autopista urbana. A diferencia de las estaciones de trenes, en las que sólo se puede tomar el coche en las estaciones, los ómnibus suben a la Bus-way luego de haber recorrido diversos circuitos en la ciudad como ómnibus tradicionales, para luego subir a una vía rápida.

Cohn trabaja actualmente en la vía norte-sur y en el desarrollo de proyectos para las estaciones y su vinculación con los otros tipos de transporte público. Además de desarrollar trabajos para nuevos túneles en la vía que conduce al aeropuerto de la ciudad.

El Grupo Place es un equipo multidisciplinario que se dedica, como se desprende letra por letra de su nombre (en inglés), al planeamiento, paisajismo, atracciones, diseños cívicos y medio ambiente. Esta semana de visita por Buenos Aires, Cohn dio una conferencia en la SCA explicando y mostrando el resultado de las intervenciones a escala urbana en las que participa actualmente. Como todo estudio que se dedica a grandes intervenciones urbanas, el Grupo Place tiene el ojo puesto en China. Cohn intervino recientemente en un concurso para la ciudad de Wuxi en donde el agua y la relación con el borde construido se funden entre sí (ver imagen). Parte de la tarea de Cohn en el grupo consiste en hacer entender en una determinada etapa del proyecto urbano las consecuencias de las obras de ingeniería y su impacto en las ciudades. Su idea es conseguir que estos grandes proyectos no se conviertan en moles de hormigón produciendo un impacto en el paisaje urbano existente. Por eso, Alejandro Cohn recalca la necesidad de trabajar con la memoria del lugar y sus características singulares.