Si la idea de “Zizek-Urban Beats Club” era apostar al multiculturalismo de esta Buenos Aires modelo 2006 en el que cada vez son más los turistas que eligen instalarse en la Reina del Plata, este ciclo comenzó con el pie derecho: “El dueño de X vos quedó alucinado: había africanos, chinos, indígenas, húngaros, alemanes, españoles, estadounidenses. En la primera fiesta hubo gente de más de 10 nacionalidades”. Acorde con el mítico Crisol de Razas la música de Zizek abarca hip hop, dance hall, cumbia, reggaeton, crunk y apuesta a los mush ups de Villa Diamante, que fue el que le dio el nombre a un ciclo que se iba a llamar “Susana”.

“La verdad es que me interesaba hacer algo que sea más amplio, más multicultural y cosmopolita”, afirma Nim, DJ residente de este ciclo, productor y director de Bomboclap records, nuevo sello orientado al hip hop y al dancehall que ya editó a Princesa, que confirmó su magentismo bailable y está por editar a El Maestro, talentoso raper que ayer cerró la segunda jornada de un ciclo que sorprende por más de una razón. Para comenzar, el nombre de esta efervescente opción ciclo cita al pensador Slavo Zîzêk (intelectual nacido en Eslovenia que compara en sus textos al multiculturalismo global con las políticas obreras de la burguesía: una manera respetuosa y tolerante de marcar clases sociales) y confirma que Buenos Aires está a pleno.

El enorme y simpático G-Love, americano oriundo de San Antonio no tiene dudas: “Ya hay un consenso internacional de que a nivel cultural ésta es una de las cinco mejores ciudades de todo el mundo. Yo vine en el 2002, me instalé acá y armé what’s up (una muy útil agenda virtual: www.whatsupbuenosaires.com). Estuve viviendo en China unos meses pero extrañaba Buenos Aires: para mí es la mejor ciudad del mundo y me gusta la idea de que se mezclen artistas emergentes de acá y de Estados Unidos”.

Quienes hayan podido escuchar ayer al Maestroshao (cuya inteligencia callejera está por ver la luz en Filosofía y letras, esperado disco debut) y escuchado el set de “crunk” de Dj Perty ya sabrán que la música es promiscua por naturaleza: el dancehall (adaptación jamaiquina del hip hop), el hip hop, el soul y la cumbia están, de alguna manera, presentes en el sonido de este maestro. Villa Diamante, el otro puntal de estas fiestas, hasta se anima a jugar con G-Love con la palabra “cosmopolítica”. “Creo que la electrónica ya fue. Está claro que ya nadie se divierte más con eso”, cree. El Maestro, por su parte, advierte una realidad: “Ahora se viene el dancehall, que mucha gente todavía no lo conoce. La gente tiene ganas de bailar algo más cadencioso, más caliente, no tan frío como la mayoría de la electrónica. Con la electrónica se perdió lo sexual del baile, y con el dancehall eso va a volver con todo, porque además te permite cantar una canción”. Princesa asiente: “La gente quiere volver un poco al cuerpo”. El próximo miércoles se viene la parte internacional de Zizek, con Oro 11 (un norteamericano que quedó fascinado con la cumbia y que hace mush ups cumbieros con una técnica impecable y que ya están sonando en NY), Cinba & Guial y Spectre. Y el 25 será el turno del carismático Yao (que está introduciendo en sus líricas clases de castellano de primer nivel, ya que es de USA) y de una sorpresa total: Martematik, un excelente raper con profundas inquietudes metafísicas. Después no digan que el NO no les avisó.

* Miércoles de octubre en X Vos Buenos Aires en Balcarce 563. Entrada $10 con consumición. A las 23.