La posibilidad de estar en el sofá de tu casa, en patas, con el catering preferido y la compañía deseada, y desde esa situación tan confortable vencer la dictadura de la programación televisiva (y la dictadura de los videoclubes, y la dictadura del televisor, y la dictadura de los cortes comerciales, y la dictadura del zapping, y siguen las dictaduras) parece haber sido el motor fundamental a la hora de que los músicos encuestados por el NO se pronunciaran por un sitio web. Los 9 sufragios conseguidos por Cuevana.tv —a los que bien podría añadirse un voto más, el que sumó una web afín, Pelis24.com— indican que uno de los hábitos más difundidos entre las costumbres virtuales de los rockers es descargar, o ver online, series televisivas y películas. Y vendría al caso preguntar cuántos de los 7 votos que cosechó el portal nac & pop Taringa.net (resultó tercero en el escrutinio sobre webs) provienen, también, de sus bancos de links para bajar o ver en vivo películas y series. Lo cierto es que, tanto sea por culpa de Harry Potter o de Lost, a la hora de sentarse frente a su computadora la comunidad rocker pareciera preferir el consumo de cine y televisión, aun antes que el de... música. Lo que no significa que la música no haya estado presente entre las preferencias del electorado, claro, en el momento de votar por un sitio de Internet; pero sí sugiere que los internautas que consumen música tienen preferencias más diversas, menos cautivas de una sola fuente. La web de intercambio musical más nombrada resultó ser Grooveshark.com (5 votos), y también hubo menciones para sitios oficiales de artistas (Paul McCartney, Coldplay, Horcas), para disquerías online (Soyrock.com) y para ascendentes sellos virtuales (Mamushkadogs.com.ar, Triplerrrdiscos.com.ar, Disqueria-t.blogspot.com).

El “voto informado” se hizo presente con fuerza, lo que permite lanzar una primicia que podría convertirse en una idea hegemónica: parece que Internet “te conecta con el mundo”. En tal sentido, el más mentado que visitado sitio de Wikileaks —supuesto causante del máximo escándalo entre Internet y el poder político (norteamericano) hasta la fecha— conquistó el segundo puesto en medio de la extraña, insondable y aparente batalla entre hackers, servicios, periodistas, abogados y rubias. ¿Cuántos de los 7 rockers que votaron por Wikileaks habrán navegado por allí, habrán leído los cables confidenciales revelados, habrán echo de Wikileaks o de sus espejos repetidores su página de inicio? La encuesta no arrojó ese dato, pero lo que sí se advierte es que la simpatía que puede cosechar en la escena rock cualquiera que (aparentemente) les escupa un poquito el asado a los parrilleros del Pentágono. Más atrás, entre los ávidos por la información más variopinta, aparecen los fans del jefe de Gabinete nacional (¡un voto para Anibalfernandez.com.ar!) y los futboleros, que eligieron la web del diario deportivo Olé.com.ar y el excelente blog Enunabaldosa.com, la mejor base de datos sobre jugadores bizarros que alguna vez pasaron por las ligas de la AFA. Y se viene otra primicia: no todos navegan por la web en busca de los grandes temas que conmueven a la Casa Blanca.