AMANECER, EL áLBUM BLANCO DE BOMBA ESTéREO
En medio de cambios en la vida de Li Saumet y Simón Mejía aparece un cuarto volumen que es más afro que tropi.
› Por Julia González
“Yo de la vida todavía estoy aprendiendo, es como un viaje, es como un sueño, es la película que estoy dirigiendo”, rapea Li Saumet en Amanecer, primer track del nuevo disco de Bomba Estéreo, que saldrá a la venta este martes 2/6. Rapea Li y resiste con solidez ese podio bien ganado tras casi diez años de sembrar por el mundo el son de Bomba Estéreo. Desde su explosión con Estalla en 2008, la banda colombiana concede el poder a la cumbia psicodélica y al folclore de sus ancestros. Pero cuando un artista trasciende el paso del tiempo, su obra determina los propios contextos y algo así sucede con los creadores de Fuego. Si con Estalla se entregaban a la fiesta, en Elegancia tropical (2012) se adentraban en temas espirituales y en este cuarto disco, Amanecer, se enamoran.
Decía la cantante al NO en 2011: “Con Estalla era la primera vez que escribíamos un disco, entonces hice lo primero que se me cruzaba, creo que no lo pensé mucho, quería hablar de cualquier tema. Pero cada vez que uno va creciendo va cambiando, ando pensando cosas diferentes y con todo este proceso hay una evolución. Porque cuando estás cantando estás comunicando y cuando comunicas es una gran responsabilidad, entonces eso de pronto te lleva a escribir letras un poco más desde adentro”.
El sol atraviesa el plano del horizonte y franquea el hemisferio visible. La altura astronómica pasa de negativa a positiva, y sucede la primera luz del día. Eso es el amanecer. “Es lo que sentimos mientras componíamos el disco, a medida que se crece como músico y como persona las perspectivas sobre el mundo y la música van cambiando. Cada disco es una obra que refleja en lo que uno está en el momento. En este caso específico, resultó ser un disco bastante luminoso, casi blanco”, dice Simón Mejía, que se ocupa de la dirección, el bajo y los sintetizadores.
Las canciones de Amanecer hablan de cambios positivos, de búsquedas, de amor. Con la misma exploración en las programaciones, aunque con una profundización en las melodías vocales, Bomba Estéreo se interna en los beats con tendencias entre afro, hip hop y la música electrónica. “Es claro el crecimiento”, reflexiona Simón. “Quizá sea el disco más pro que hemos hecho hasta ahora, y el más arriesgado. De cumbia queda poco acá.”
Abiertos a la esencia de la música colombiana, glorificaron su tradición y se ramificaron a lo largo del horizonte. De a poco, esta coalición entre cumbia, folclore colombiano y electrónica tomó posesión desde el Caribe hacia el mundo. Por eso, Bomba Estéreo suma varios porotos en eso de llevar la cumbia donde jamás se hubiera escuchado, como Nueva York o Shanghai. “Creo que Colombia y Argentina cada vez son más cercanos, sólo es ver la cantidad de colombianos que hay allá. Esperamos que nuestros compatriotas hayan hecho una buena labor de imagen del país”, dice Simón a propósito de la unión de ambos países, y resalta la pasión con la que acá se recibe la música. “Nos gusta la vibra de la gente y de la ciudad, es increíble. Personalmente tengo lazos hace rato con Buenos Aires, la quiero mucho, me parece de esos lugares del mundo con mucho feeling.”
Aproximadamente un año les tomó la producción de Amanecer, cuya primera etapa fue de composición íntima en la casa de cada uno, Simón en Bogotá, preparando la música y Li, en Barranquilla, las letras. “Para mí ésa es la mejor parte, la íntima, quizá la más egoísta, cuando la música es para uno nada más. Luego, una segunda fase cuando ya teníamos unos demos, alrededor de veinte, y nos sentamos con el productor Ricky Reed y en sesiones entre Bogotá y Los Angeles le dimos forma final a los temas que escogimos”, dice él.
–Nos parecía que resumía el mood general del disco en un solo track: dos mundos que se encuentran, el del Caribe con el de la electrónica de vanguardia. Ese track maneja una especie de esquizofrenia que nos ha perseguido siempre en nuestras búsquedas musicales que es pasar de un mundo y de una influencia musical a la otra sin dificultad.
–No específicamente. Es una canción que busca exaltar la individualidad en un mundo cada vez más homogéneo y globalizado, en donde además ahora todos tienen la chance de comentar. Al fin de cuentas, lo que diga la gente importa poco, lo que importa es uno sentirse bien y estar bien por dentro.
Viernes 29 en Niceto Club, Niceto Vega 5510. A las 21.
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