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Acaso desde la aparición de Virus en la escena platense, allá por 1980, que las paranoias infectológicas no generaban tanta repercusión en la escena rockera. El primer semestre de 2009 deparó para todas las bandas de rock un fuerte impacto epidemiológico, gracias a los esfuerzos del dengue y la gripe A. Los artistas se contagiaron de nuevas musas y padecieron nuevos horizontes inmunológicos, ideales para ser mirados desde la contracultura joven. Así, los compositores populares trabajan contrarreloj para escribir canciones sobre las epidemias: no sería sorpresa que en los próximos días reconocidos rockers registren en Sadaic composiciones como el rocanrol drogón “Barbijúricos”, la balada romántica “Engrípate conmigo”, el rabioso nü metal “Sacate ese dengue” o el hitazo de pop-rock urbano “El dijo, ella barbijo”.

Otras bandas se encuentran ante el desafío de tocar o parar. Si bien el peligro de contagios que implican las multitudes no representa un riesgo para el under (donde nunca hay multitudes), algunos músicos empiezan a mirarse mal entre ellos, ya que las salas de ensayo son caldos de cultivo. Inclusive una costumbre tan folklórica y saludable como los típicos escupitajos punk es ahora entendida como una verdadera arma bacteriológica, por lo que en todo festipunk se reparten flyers con la pedagógica leyenda “prohibido salivar en el rostro a los músicos”.

La otra gran decisión del Ministerio de Salud del rock ha sido disponer que en los conciertos los músicos toquen con barbijo. Esto no representa mayor inconveniente para guitarristas, bajistas, bateristas ni tecladistas, aunque sí ha generado todo un problema a cantantes, armoniquistas y saxofonistas, que se sienten discriminados.

En ese contexto temible surge Alcohogel, la banda de pop instrumental que hace de la prevención antiinfecciosa todo un estilo. “Le dimos licencia al cantante”, asegura a través de su barbijo el bajista Pig Vacunator. Esa licencia, otorgada justo en el momento del debut escénico de la banda, ha privado al gran público de conocer las letras y las melodías principales de las canciones de Alcohogel. ¿El rock argentino va acaso hacia a una escena instrumental? ¡Aaagghhhh! ¡Eso sí que es paranoia! ¡Que alguien haga algo!

* Cualquier parecido con la realidad debe ser un malentendido que se expandió en forma viral.