Grooveshark.com: “Es enfermante”, explicita uno de sus usuarios. Básicamente tomaron lo mejor de servicios como Last.fm, Goear y Pandora, llevándolo a un nuevo nivel. Más grande, más rápido y mejor. La posibilidad de ir sumando canciones al playlist es tan revolucionaria como simplificadora. Sólo se trata de arrastrar y escuchar.

Musicuo.com: Si viste alguna película en Cuevana, habrás visto el banner de este servicio. Es que Musicuo fue lanzada por los creadores del sitio que reformó la manera de ver películas y series. Es casi un calco de Grooveshark, pero en castellano. “Es el futuro de la música en Internet. No necesitas usar más programas P2P, con la inminente amenaza de ser infectado por algún virus; no necesitas descargar archivos, tu disco duro puede descansar tranquilo. Escucha tu música online, y si por casualidad no la encuentras en Musicuo, súbela al sitio y amplía tu biblioteca. ¡No hay límites!”, entusiasman.

Sonora: El servicio musical de Speedy se divide entre el Plus y el Free. El primero cuenta con 50 mil usuarios con acceso a escuchas ilimitadas, 10 downloads por mes (“queremos que sean más”) y un servicio free abierto al tráfico con el límite de 20 horas de escucha. “Todos pueden escuchar algo: ése es nuestro espíritu”, alegan. Prometen promociones de todo tipo y color.

Musicovery: Su gran distintivo es que en vez de dividir las canciones por género, lo hace por estado de ánimo. El mood de la canción acompaña según uno se sienta dark, positivo, calmado y energético.

Me canto: Programa que sirve para transferir la música a la nube. “Olvidate de sincronizar y subir tus archivos”, prometen.

mSpot: Sistema de almacenamiento que permite subir canciones a la nube sin drivers ni instalaciones.