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En un vuelo de British Airways que unía Londres con Hong Kong, los 275 pasajeros lo estaban pasando genial hasta que una voz femenina lo arruinó todo. “Este es un anuncio de emergencia”, se escuchó por los altavoces de la cabina. “Vamos a tener que aterrizar en el agua.”

Es de los peores errores que puede cometer un piloto. “Dicen que apretó el botón equivocado porque están uno al lado del otro”, declaró Michelle Lord al diario británico The Sun.

La tripulación a bordo tuvo que recorrer inmediatamente el avión para calmar a los pasajeros que, lógicamente, se hallaban al borde del pánico o directamente en pleno ataque de nervios.

“No puedo pensar en nada peor que te digan que tu avión se va a estrellar”, comentó otro pasajero. Debe haber algo peor seguramente; algún otro anuncio en esa fila de botones terrible del tablero, donde el aterrizaje feliz y el desastre inminente se hallan apenas a un dedo de distancia.