Las marchas en Wall Street no sólo suman cada vez más manifestantes sino que se propagan por otras ciudades norteamericanas. Mientras, la policía reprime de una manera violenta y absurda, y el banco JPMorgan reconoce en su página haber donado este año más 4 millones de dólares en equipamiento a la policía neoyorquina. Estos manifestantes fueron dos de los más notables. Un ex combatiente que esgrime: “Peleé por mi país dos veces, y ésta es la primera vez que conozco a mi enemigo”. Y una mujer con un cartel que dice: “Tengo 87 años y estoy enojada como el infierno”.