Si hubiesen conocido su historia a tiempo, los productores de HBO seguro hubieran creado un personaje inspirado en Jeorg Grossmann para la funeraria de Six Feet Under. No es para menos: el alemán de 48 años, que reside en las cercanías de Frankfurt, ha re-inventado el carro fúnebre. ¿Cómo? Llevando los cuerpos en el sidecar tuneado de una Harley negra, lista para la ocasión.

Habiendo hecho su debut el pasado 16 de marzo en un camino cerca de Lisingen con un prototipo en una Kawasaki, el sueño (final) de motoqueros adictos a las dos ruedas verá la luz a fin de año, cuando los diez modelos patentados de Grossmann estén ensamblados y listos para funcionar.

Aunque Jeorg cuenta que cada moto le ha costado casi 80 mil dólares, se lo ve confiado en su negocio. Acorde a los cálculos del empresario mortuorio, la inversión será rápidamente amortizada, en tanto –calcula– recibirá mil encargos al año sólo en Alemania y por el servicio cobrará unos 1500 dólares. Además, ya tiene contrato para abrir sucursal en Suiza y otros países se han mostrado interesados en su idea. “La gente está entusiasmada con las Harley fúnebres. Son algo muy especial”, explicó el hombre vestido, como corresponde, de cuero negro.