De Carlos Attwell Ocantos (1930),
tango con música de Fernando Randle.
Placer de dioses, baile
perverso,
el tango es rito y es religión,
porque estas criollas son sus altares
y el sacerdote su bandoneón.
Quiero sentirme aprisionado,
como en la cárcel de mi dolor.
Guarda silencio mitad de mi alma
y hay un secreto entre los dos.
Se arrastran los compases
compadrones
del tango que se adueña de tus fibras.
El juego de tus rulos en mis sienes
será la extrema unción de mi agonía.
Te invito a penetrar en ese templo
donde todo el amor lo purifica,
viviremos los dos el cuarto de hora
de la danza nostálgica y maligna.
Placer de dioses, baile
perverso...
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux