Desde Santa Fe

El diálogo con Hermes Binner comenzó con una ironía. "Jorge Obeid dijo que le dejará la plata para pagar el sueldo y el aguinaldo a los empleados públicos en diciembre, 200 millones de pesos del fondo anticíclico, 80 millones del fondo de obras públicas y 300 millones para obras en ejecución. En total, 1.400 millones. ¿Qué piensa usted?", preguntó Rosario/12. "Que vamos a tener que pagar mucha publicidad, pero la pagaremos", contestó el gobernador electo. Binner repasó después el último tramo de la transición, le bajó el tono a la salida de su primer ministro antes de asumir, Hugo Arrillaga, dijo que se tomará su tiempo para elegir al reemplazante, elogió a la presidenta electa Cristina Fernández de Kirchner y anunció que sumará a su gobierno a sectores del kirchnerismo que lo apoyaron en la provincia. "La gente ha votado un cambio y nosotros vamos a cambiar. No tenga ninguna duda. De lo contrario, para seguir haciendo lo que se estaba haciendo, se hubiesen quedado los que están porque tampoco se terminaba el mundo", apuntó.

-¿Le hubiera gustado otra transición, con menos conflictos?

-Pero es como es. Entonces, hay que aceptarla como es.

-¿Cómo le fue en la entrevista con la presidenta electa Cristina Fernández de Kirchner?

-Muy bien. La verdad que encontré una persona interesada en los destinos de Santa Fe, por lo que aporta la provincia al crecimiento de la Nación: 1.300 millones de dólares anuales en retenciones, una cifra realmente extraordinaria. Y también la vi muy interesada en establecer un diálogo con toda la cadena de valor de la lechería y la ganadería. Creo que es muchísimo lo que se puede hacer si trabajamos junto al gobierno nacional.

-¿Y esos 1.300 millones de dólares pueden volver a Santa Fe de alguna manera?

-En la medida que haya obras públicas, las cosas van mejorar. El presupuesto que sancionó la Cámara de Diputados de la Nación tiene muchas obras públicas para Santa Fe y esto es una ventaja. De manera que estará en nosotros preparar los proyectos y ayudar a que todas esas obras se concreten porque significarán un incremento de nuestra producción.

-¿La diferencia de signo político no será un impedimento en su relación con el gobierno nacional?

-De ninguna manera. Tenemos amigos comunes, por ejemplo (el ex presidente de Chile), Ricardo Lagos, que vino a Santa Fe en la época preelectoral y ahora nos comentó que va a escribir el prólogo de un libro que publicará Cristina. Bueno, son hechos que nos unen.

-Y usted fue el primer gobernador electo que recibió la presidenta. ¿Un gesto político especial?

-Un gesto para los santafesinos. Las elecciones ya terminaron y ahora necesitamos avanzar en la construcción de un país mejor. Santa Fe tiene la misión de ayudar a un país mejor, pero también la necesidad de atender sus demandas económicas y sociales. Es vital para nosotros tener una excelente relación con la Presidencia de la Nación -aseguró Binner.

-¿Qué pasó con Arrillaga? Se quedó sin un ministro antes de asumir.

-Traté de convencerlo de que no abandonara el Ministerio de Obras Públicas, pero la tarea fue infructuosa. Arrillaga quiere trabajar más sobre temas vinculados, no sólo a la obra pública sino al medio ambiente, a lo social, aprovechar su condición de licenciado en economía, así que va a seguir como asesor del gobernador.

-Arrillaga ya había elegido a varios colaboradores: designó secretario de Obras Públicas al ex decano de la Facultad de Arquitectura de Santa Fe y presidente del directorio de la emisora LT10, Julio Talín. ¿Talin puede ser el nuevo ministro?

-No lo conozco.

-También le ofreció al ingeniero Pablo Hillar hacerse cargo de Vialidad Provincial, pero los radicales frentistas impulsan para ese puesto al ingeniero Jorge Placenzotti, intendente de San Carlos. ¿Ese fue el conflicto?

-No conozco.

-Pero hace diez días hubo una reunión de la transición en el Ministerio de Obras Públicas en la que participaron Talín, Hillar y otro designado: Carlos Beltrán, que iba a ser subsecretario de Logística. Más el actual administrador de Vialidad Provincial, Rubén Pirola.

-Mire, no sé cuanto sabe usted. Lo que yo sé es lo que me dijo el licenciado Arrillaga. Entonces, mi máximo respeto hacia él. Es más, lo he convocado para que sea asesor del gobernador para estos cuatro años.

-¿Y cuándo designa al nuevo ministro?.

-Nosotros no venimos con un plan B. Apostamos el mejor plan, entendíamos que el mejor ministro de Obras Públicas podía ser Arrillaga y por eso trabajamos en ese sentido.

-¿La salida de Arrillaga fue por la puja con Placenzotti?

-No es así.

-Esa es la versión que circuló estos días.

-Bueno, pero la versión que usted tiene que tomar es la que yo le digo -se molestó Binner-. Nosotros tenemos que buscar el mejor lugar para la gente. En este tiempo nos hemos conocido (con Arrillaga), tenemos un mutuo respeto, entonces, sería una deslealtad de mi parte inventar situaciones que no ocurrieron para justificar nada. Las cosas son así. Las relaciones humanas son importantes, pero también están las posibilidades y la decisión de cada uno y en esto hay que respetar la opinión de la gente.

-¿Cuándo se conocerá la segunda y tercera línea del gabinete?

-Hay muchos nombres que ya se conocen. Seguramente en las próximas horas van a tener esa información, ya están mas o menos armados.

-¿La diputada María del Carmen Alarcón va a ocupar algún cargo?

-Sí, en la Secretaría de la Producción.

-¿También se mencionó en la cartera de Producción a dos intendentes radicales: Gonzalo Toselli, de Sunchales y Rafael De Pace, de Esperanza.

-Toselli seguro que sí, sobre De Pace todavía no tengo ninguna notificación.

-¿Sumará a su gobierno al sector del kirchnerismo que lo apoyó en la provincia?

-Sí, por supuesto que si.

-¿Puede hacer algún anuncio ahora o lo va a hacer más adelante?

-Los vamos a hacer en el futuro. Pero, por supuesto, vamos a sumar a toda la gente que ha trabajado y tienen voluntad de seguir trabajando. Nosotros queremos que cada cargo no sea un reconocimiento político por lo que se ha hecho, sino un lugar de trabajo. Lo que transforma la realidad es la vocación de hacer y el entusiasmo por innovar. Mire, la gente ha votado un cambio y nosotros vamos a cambiar. No tenga ninguna duda. De lo contrario, para seguir haciendo lo que se estaba haciendo, se hubiesen quedado los que están porque tampoco se terminaba el mundo -finalizó Binner.