La naturaleza determinó que en el humedal de Melincué, en territorio santafesino viva la especie de flamenco más rara del mundo: el Andino. Después de una década de dilaciones, el gobernador Hermes Binner elevó el pedido para que éste espacio sea declarado Sitio Ramsar -humedal de importancia internacional-, un trámite que no fue realizado por los anteriores gobiernos provinciales. Ahora, las entidades ambientalistas confían en obtener ese título a fin de este mes. Cuando se cumpla este requisito, se podrá avanzar en la explotación del turismo de naturaleza.

El Humedal del sur santafesino es uno de los pocos sitios en Latinoamérica adonde habitan los Flamencos Andinos, una especie que además de ser la más rara del mundo, está en vías de extinción. De los 34 mil ejemplares que viven en Perú, Bolivia, Chile y Argentina, el 17 por ciento tiene parte de su recorrido migratorio en Melincué.

Diez años después de que la Convención Internacional Ramsar reconociera en Melincué cuatro de los nueve criterios que debe tener un humedal para obtener importancia internacional, Binner elevó el pedido de declaración al Comité Nacional Ramsar.

"Esta declaración es una herramienta de gestión que sirve para pedir subsidios y apoyo para realizar actividades de desarrollo sustentable", explicó Marcelo Romano, uno de los miembros del Centro de Investigaciones en Biodiversidad y Ambiente Ecosur, que desde hace 17 años viene monitoreando la Cuenca de Melincué.

Romano adelantó que luego de la declaración se debe formar un Comité de Manejo del Sitio "que tiene que ser integrado por todos los actores: organizaciones no gubernamentales, productores agropecuarios, docentes y funcionarios". Este organismo definirá los pasos a seguir.

Así, entre las posibles actividades a desarrollar, destacó la del "turismo de naturaleza, que mueve mucho dinero en todo el mundo", y cualquier otra actividad "que no perjudique al medioambiente".

Por este motivo, Marcelo Luppi, un guardafauna de Melincué con veinte años de experiencia, se comunicó con el gerente del Hotel Casino & Resort Melincué para solicitarle que suspenda una carrera de motonáutica prevista en la laguna que forma parte del humedal. También solicitará que cambien el sitio a los organizadores de una carrera de cuatriciclos que se está proyectando alrededor de la laguna. Los gases que liberan estos vehículos no entran en las pautas de cuidado de medioambiente requeridos.

Sin embargo, la riqueza ambiental no es conocida por la población. "La gente de Melincué no sabe nada", aseguró Luppi, quien responsabilizó a los sucesivos gobiernos. "Lo poco que se hizo nació de las escuelas. De parte de las autoridades nunca hubo ningún interés en informar ni en cuidar el lugar", sentenció. De cualquier manera, vaticinó que "si a la gente se le explica va a entender la importancia del humedal y lo va a cuidar".

En abril de 2006, antes de que comenzara a construirse el hotel﷓casino, el entonces diputado provincial por el ARI Aldo Strada había presentado un pedido de informes ﷓que nunca fue respondido﷓ en el que preguntaba si se había elaborado para este área un Plan Estratégico de acuerdo a la Ley de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, si el Area Natural Protegida había sido categorizada de acuerdo al Sistema Provincial, si la ubicación del futuro casino dependía de la zonificación determinada por dicho sistema, quiénes habían adquirido propiedades en su posible localización, y si existían estudios relativos a la posible nueva traza de la Ruta 90 en esa localidad.

El argumento era que ninguno de los sucesivos gobiernos habían pedido la declaración de Sitio Ramsar y mientras tanto se planeaban obras de infraestructura y turísticas sin contemplar los cuidados medioambientales que el lugar requería.

Más allá de la falta de información y de las demoras, la situación cambió. "Dependerá de los plazos burocráticos, pero para fines de junio ya debería estar efectiva la declaración", concluyó Romano.