Ayer, con más de 34 grados de temperatura hacia el mediodía, la ciudad de Santa Fe -en gran parte- volvió a quedarse sin agua. Como en julio pasado un gran caño maestro mostró su deterioro y hubo que recurrir a tomas alternativas para mitigar en alguna medida la falta de presión que se registró en distintas barriadas. Desde la empresa Aguas Santafesinas informaron ayer que los operarios arreglaron el desperfecto cerca de las 18, por lo que el líquido escurría por el caño maestro camino a la planta. De todos modos aseguraron que la normalidad llegará recién hoy en horas de la mañana. Hasta entonces se puede registrar baja presión en algunas zonas y arrastre de sedimentos. Una junta de hierro se había roto en horas de la madrugada.

En las primeras horas del día de ayer se rompió un caño de la

"toma Hernández" del riacho Santa Fe por lo que el ejido urbano fue -durante gran parte del día provisto por sólo uno de los dos acueductos que llevan el líquido a la planta potabilizadora. Si bien la situación no fue la ideal, el funcionamiento de una de las tomas mitigó los sucesos.

Desde la empresa de aguas indicaron que "lo que se produjo es una rotura en el acueducto de agua cruda de la toma ubicada en la zona del Puerto. Esto nos ha obligado a sacar de servicio esa toma y mantener en servicio la toma de Colastiné, por eso hay una reducción de la entrega de agua red, lo que produce baja presión", explicó por la mañana Dante de Nardo.

Los operarios trabajaron en el lugar (en las inmediaciones de avenida Alem, a la altura de la ex usina Calchines) entre las 5 y las 18. Cerca del mediodía llegaron a la fisura y tardaron unas seis horas en extraer el agua acumulada, detectar el lugar exacto de la rotura y repararlo. Alberto Daniele, presidente del Directorio de ASSA, quien confirmó que pasadas las 12 se comenzó a bombear el agua fuera del pozo cavado para proceder a la reparación. Germán Nessier, gerente de Relaciones Institucionales de ASSA, comentó que a las 18 quedó concluido el trabajo de reparación por lo que la toma se puso en funcionamiento y, cerca de una hora más tarde ya permitía el paso del líquido elemento hacia la planta potabilizadora.

"Paulatinamente se va a ir presurizando el agua que ya está llegando. Tenemos que hacer una operación gradual para presurizar el sistema e ir devolviendo el agua", a todos los domicilios de la capital, aseguró el vocero de la compañía. Con respecto a la falla, comentó que una junta de hierro fundida fue la averiada por lo que descartó que el problema se haya generado en la cañería exactamente. Por suerte se trató de una quebradura superficial que se solucionó con la colocación de una abrazadera que contenga el elemento y permita la normal circulación del mismo.

Nessier además afirmó que "a partir de ahora se va a tender a normalizar la presurización de la red". No obstante pidió un poquito más de paciencia a los usuarios del sistema porque "los niveles de presión no se van a recuperar en forma inmediata sino, más bien a partir de mañana a la mañana (por hoy)".