El radicalismo santafesino mostró ayer hasta dónde pueden llegar las consecuencias para el socialismo, por no haber alcanzado un acuerdo a nivel nacional. La UCR impugnó ante la justicia federal con competencia electoral, el nombre Frente Amplio Progresista con el que el socialismo y el GEN impulsan la fórmula Hermes Binner-Norma Morandini. "No queremos que se mezclen las cosas y que la gente y los electores tengan en claro que una cosa es el Frente Progresista a nivel provincial y otra cosa es el frente de Binner a nivel nacional", aseguró ayer el diputado provincial Darío Boscarol sobre la presentación que hizo el primer candidato a diputado nacional de la lista de la UCR santafesina, Federico Pezz. La diputada nacional del socialismo Alicia Ciciliani, confirmó que "ya presentamos el descargo y esperamos ahora un pronunciamiento de la justicia".

Boscarol admitió que no es sólo una cuestión de nomenclatura, sino que se trata de un reparo político profundo. "Queremos dejar en claro y preservar los acuerdos provinciales dentro del Frente Progresista Cívico y Social. No queremos que los avatares de los acuerdos o desacuerdos nacionales se mezclen en la elección del 24 de julio y además la intención es dejar en claro las decisiones que la UCR ha tomado en diversos planos. Entendemos que la denominación de ambos frentes puede llamar a confusión y pretendemos evitar esa situación".