La muerte de un bebé de tres meses de vida por causa del frío, el jueves por la mañana, en la capital provincial, volvió a poner en primer plano la indefensión ante las inclemencias del tiempo en la que la pobreza sume a los habitantes del barrio costero Alto Verde. Ayer, el pequeño Thiago ﷓gemelo de Uriel Ayala, el niño fallecido﷓ seguía internado en terapia intensiva del Hospital Alassia, todavía bajo los efectos del cuadro de hipotermia aguda que terminó con la vida de su hermano. En el barrio todavía duraba el impacto por la novedad, aunque desde la red de instituciones que operan en la zona el drama no causa sorpresa. "No es raro que pasen estas cosas. En Alto Verde el hacinamiento es común en muchas casas. Familias donde se duerme en una misma cama todos juntos, no hay mesas para juntarse a comer, ni sillas donde sentarse", contó Nilda Díaz, coordinadora de los jardines del Movimiento Sin Techo.

Uriel Ayala era uno de los cuatro hijos de una pareja que hacía pocos días se había instalado en un rancho de chapa en la manzana 3 del barrio costero. Su abuela había llamado al servicio municipal de emergencias el jueves por la mañana, pero cuando el médico arribó el bebé ya no tenía signos vitales.

En Alto Verde predomina la pobreza, aunque no todas las familias se encuentran en un nivel de exclusión como el de los Ayala. Salustiana, una vecina, contó ayer que luego de la tragedia, el barrio acercó abrigos y frazadas para esta familia. "No soy rica, pero tengo con qué taparme. Otros necesitan toda la ayuda posible", dijo.

María Rosa Alcaraz, docente en uno de los jardines de la ONG de los Sin Techo, se mostró sorprendida de que el dispositivo estatal de contención no haya advertido la vulnerabilidad de los Ayala. "Los agentes sanitarios recorren el barrio", dijo. Alcaraz explicó que "hay gente que se fue a vivir a las casitas de material que hizo la Municipalidad en el barrio, pero otras familias pasaron a ocupar los ranchitos de chapa que aquellos ocupaban antes. Así se armaron asentamientos nuevos. Alto Verde es isla, con piso de arena, por lo tanto siempre está húmedo, y en esas condiciones, es durísimo soportar el invierno", expuso.