SANTA FE › LA ASAMBLEA LEGISLATIVA TUMBó SU NOMBRAMIENTO COMO AUDITOR GENERAL
El argumento fue que Font no acreditó el ejercicio profesional como abogado y carece de antecedentes en la magistratura o en la Fiscalía. "Es una injusticia, una arbitrariedad", se quejaron los legisladores oficialistas.
› Por Juan Carlos Tizziani
Desde Santa Fe
La Asamblea Legislativa rechazó ayer el pliego del primer ex funcionario de Hermes Binner que intenta pasar desde la Casa Gris a la justicia. Por 41 votos a 22, una mayoría de legisladores del PJ y del Pro negó el acuerdo al ex subsecretario de Seguridad Comunitaria, Enrique Font, para acceder al cargo de auditor general del Ministerio Público de la Acusación, que había ganado por concurso. Ahora, el Poder Ejecutivo deberá mandar un nuevo pliego con otro nombre. "Una injusticia, una arbitrariedad. Evidentemente, el pecado que trae el doctor Font es haber sido funcionario de Binner", se lamentó el diputado socialista Joaquín Blanco. "No dramaticemos", les contestó el diputado del PJ, Héctor Acuña y dijo que el problema era que Font no acreditó el ejercicio profesional como abogado y carece de antecedentes en la magistratura o en la Fiscalía. "Para nosotros no tiene el perfil adecuado. Más allá de que a ustedes les guste o no", completó el senador del PJ, Ricardo Kauffmann, presidente de la comisión de Acuerdos. En el concurso de antecedentes y oposición para acceder al cargo, Font le había ganado a la jueza Raquel Cosgaya (Instrucción 6 de Rosario) y al fiscal Esteban Franicevich por más de diez puntos.
El debate sobre el ascenso de Font cerró ayer una Asamblea Legislativa muy tensa, que también rechazó otros tres pliegos de jueces subrogantes: María Laura Maenza (Rosario), Luis Guillermo Blanco (Santa Fe) y Claudia Bressan (Reconquista), por votaciones similares.
Ya la comisión de Acuerdo había dictaminado por mayoría el rechazo del pliego de Font, con ocho firmas: siete del justicialismo: los senadores Kauffmann, Rubén Pirola, Joaquín Gramajo y los diputados Leandro Busatto, Marcela Aeberhard, Silvia De Césaris y Mario Lacava y una del Pro: Alejandra Vucasovich.
El diputado Blanco arrancó la defensa de Font al recordar que había ganado el concurso por amplio margen. "Lo vamos a defender porque se está cometiendo una tremenda injusticia, una arbitrariedad. El doctor Font ha exhibido en su curriculum una extensa carrera, tanto académica como de gestión.", agregó. Pero según Blanco, el rechazo del pliego tenía un trasfondo político. "El pecado inmanente que trae el doctor Font es haber sido funcionario del gobierno de Binner", dijo. Un juicio que después compartió otro de sus colegas. "El mal que tiene Font es haber sido parte del servicio de seguridad del gobierno. Eso, aunque algunos lo quieran negar, pesó y pesa mucho en los legisladores", tiró Raúl Lamberto.
El diputado Acuña preguntó entonces si Font tenía activa su matrícula como abogado. "Sabía que Font fue funcionario. Recuerdo que alguna vez nos explicó que la inseguridad era una sensación y no una realidad. Tal vez, el paso del tiempo lo haya llevado a cambiar de criterio ûironizó el legislador. "Pero ahora, quiero saber si tiene matrícula como abogado"
El senador Kauffmann le contestó que Font no acreditó "el ejercicio de la profesión" y tampoco ofreció antecedentes "en la magistratura" o en "alguna fiscalía". "Lo que no está en la documentación, no existe para la comisión de Acuerdos y tampoco puede existir para esta Asamblea Legislativa", advirtió.
Kauffmann estaba sentado en una banca en el medio del Frente Progresista y ante las réplicas por lo bajo de sus colegas del bloque oficial, protestó: "Señor presidente, solicito no ser interrumpido".
"Podemos dejarnos llevar por un mar de antecedentes de otro tipo, académicos y de cargos públicos, pero a nosotros no nos convencen este hombre para manejar en la práctica, no en la teoría, una labor tan importante", dijo. "Este cargo, de acuerdo a la ley que votamos, es superior al procurador general de la Corte Suprema de Justicia. Porque puede intervenir en cualquier momento para imponerle plazos a los fiscales o para urgir cualquier proceso, en la práctica, va a tener la práctica una influencia que puede ser superior a todas las magistraturas. De manera, que nuestro criterio es político, pero de la política con mayúscula, como ciencia y arte del bien común y de la división de poderes y el respeto a rajatabla de nuestra Constitución, la que hemos jurado respetar", agregó Kauffmann.
Lamberto y después la diputada Tessio intentaron aclarar que el concurso que ganó Font no exigía como requisito el ejercicio de la profesión de abogado, ni haber sido juez o fiscal. "Yo hablé de la influencia que este auditor va a tener entre los fiscales, no estoy hablando de influencias nocivas", retrucó Kauffmann. "Y cuando digo que no tiene acreditado el ejercicio profesional, no digo que tiene que exigirse ese requisito en el concurso. Y lo mismo con respecto a que no hay constancias de su paso por una fiscalía o una magistratura. Nosotros valoramos esos antecedentes porque él se va a manejar con estos actores de la actividad judicial", concluyó Kauffmann.
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