Tras un miércoles agitado para la Brigada de Neutralización de Explosivos de la policía rosarina, con cinco amenazas de bomba; ayer se recibió una nueva denuncia sobre un explosivo en el Banco Nación de Alberdi y Juan José Paso, que resultó falsa. En tanto, la investigación judicial sobre la seguidilla de hechos no arrojó resultados positivos sobre los autores. El ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, dijo en el programa "Los días contados", de Canal 5 que "da la sensación que se está probando la capacidad operativa de las fuerzas de seguridad, que han demostrado que la tienen, porque estuvieron en todo momento y en todo lugar".

Alrededor de las 8.30 de ayer, un nuevo llamado ingresó al 911, alertando sobre un bulto sospechoso en Avenida Alberdi y Juan José Paso. Enseguida se constituyeron en el lugar efectivos de la comisaría 9ª. La denuncia advertía que había un paquete sospechoso en un cesto de basura dentro del cajero automático que podía tratarse de un artefacto explosivo. Se convocó a personal de la Brigada de Explosivos, quienes realizaron una inspección ocular del Banco Nación y el Municipal --que está sobre la misma vereda-- pero se trató finalmente de una falsa alarma.

Ante la seguidilla de hechos similares, el ministro Lamberto aseguró que no se descarta ninguna hipótesis. "Es fundamental que esto se esclarezca", dijo, y ordenó al subjefe de la policía provincial, Cristian Sola que se traslade a Rosario porque "cuenta con una amplia experiencia en el tema". También apuntó a que la policía provincial "se contacte con las fuerzas nacionales de Seguridad para que haya experiencias compartidas para la investigación".

Sobre la granada que se halló anteayer, Lamberto aclaró que "no tenía capacidad operativa en forma inmediata, necesitaba sí o sí del fusil" para estallar. "Fue colocada con intenciones de generar alarma", señaló.

"Lo que tenemos hasta ahora es un solo artefacto que era inerte para explotar: no tenía tren de fuego, por lo tanto era imposible que detone por sí solo", dijo Sola a Rosario/12.

Sobre las hipótesis, Sola apuntó a la posibilidad de una maniobra distractiva, que cuenta con antecedentes de bandas que, en otras provincias como Buenos Aires, provocaron hasta incendios. "Son estrategias para medir la respuesta policial", dijo el subjefe.