Desde Santa Fe

El presidente del PJ santafesino, José Luis Freyre, convocó a los senadores de su partido para avanzar en el análisis de la reforma tributaria que el gobierno de Antonio Bonfatti propuso en la Legislatura. La reunión se realizaría la semana entrante, según informó uno de los senadores que recibió el llamado y a la vez, secretario de Prensa y Difusión del consejo ejecutivo provincial del PJ, Rubén Pirola. Después, seguiría otra ronda de consulta con los bloques de diputados justicialistas. "El objetivo es definir una agenda política y plantear la posición del partido sobre los temas de fondo y de coyuntura", explicó Pirola.

Esta semana, los senadores del PJ decidieron sincerar el debate de la reforma tributaria en el Senado. Le pidieron a Bonfatti que retire el proyecto que remitió a mediados de abril y envíe otro que supere las discrepancias en el Frente Progresista. La mayoría justicialista considera que los chispazos en el oficialismo frenaron la discusión del tema durante dos meses y creen que sólo será posible avanzar si las coincidencias entre radicales y socialistas se resumen por escrito, en un proyecto del gobierno.

Ya el lunes pasado, cuando asumió su cargo, Freyre anticipó que uno de los desafíos de la nueva conducción del PJ será definir una agenda política con los bloques parlamentarios, el Foro de Intendentes y otros actores sociales. Y anunció algunos de los puntos que debería incluir esa agenda: "Los incentivos a la producción, las políticas de inclusión social, la seguridad, la educación y la salud. El déficit fiscal y la deuda de la provincia, la emisión de las Letras del Tesoro y ahora la llamada reforma tributaria", dijo. "Ya estamos trabajando en estas cosas para definir posiciones y analizar aportes y propuestas", apuntó.

Cuando le pidieron más precisiones sobre la reforma tributaria, Freyre adelantó que habrá una ronda de consultas con los senadores, diputados, intendentes y presidentes comunales. "Pero además, hemos sumado los aportes de organizaciones sociales y gremios. Yo, personalmente, me reuní con dirigentes de Federación de Trabajadores Municipales (Festram). Vamos a escuchar a cámaras empresarias, sectores de la producción y sobre esa base trataremos de construir una posición común", explicó.

"El peronismo es un movimiento que tiene distintas opiniones sobre distintos temas. Pero nos sentaremos alrededor de una mesa todas las veces que sea necesario para tratar que esas distintas visiones y miradas se complementen y se enriquezcan y podamos llegar a una mirada lo más genérica y complementaria posible. Sobre esa base vamos a trabajar y tenemos muchas expectativas de llegar a acuerdos", afirmó Freyre.

Varios legisladores que serán convocados ya integran el consejo ejecutivo del PJ. Entre ellos, tres senadores: Pirola (secretario de Prensa y Difusión), Hugo Puchetta (tesorero) y Alberto Crosetti (vocal). Y cinco diputados: Roberto Mirabella (vicepresidente), Silvia De Césaris (prosecretaria general), Erika Gonnet (tesorera), Mario Lacava, Alejandra Obeid y el jefe del bloque del Frente para la Victoria, Darío Mascioli (vocales). Un abanico político que refleja distintas posturas sobre la reforma tributaria, desde el sector del jefe histórico de UPCN, Alberto Maguid (donde milita De Césaris), que le ofreció a Bonfatti los votos de sus cuatro diputados para aprobar la ley, hasta el ala más dura que rechaza los aumentos de impuestos si sigue la escalada del gasto público y el déficit fiscal. "La provincia es barril sin fondo", planteó esta semana el diputado Mascioli. Mientras que uno de sus colegas agregó: "En esta coyuntura, la receta del aumento de impuestos no parece ser la mejor", dijo el senador Pirola.

"La provincia está fundida. Y el responsable tiene nombre y apellido: se llama Hermes Binner", llegó a decir el diputado Mirabella en la asunción de Freyre. "Estamos gobernados por un frente que se dice progresista, cívico y social. Pero no hay cosa más antiprogresista que fundir al Estado. No hay cosa más anticívica que armar cinco nodos y asambleas ciudadanas, que si le sacamos los militantes socialistas se quedarían si nadie. Y nada más antisocial, que no poder caminar tranquilo por la calle por la inseguridad y el ejemplo es Rosario, donde en cuatro años se duplicaron los homicidios", tiró Mirabella.