Los integrantes de la Comisión de Seguridad de la Cámara de Diputados de Santa Fe recibieron ayer al periodista Carlos Del Frade, en el marco de la investigación periodística realizada a partir de denuncias aportadas por dos secretarías nacionales y que fueron remitidas al juzgado Federal Nº 12 de Buenos Aires a cargo del juez César Torres. En esas denuncias aparecerían vinculados empresarios, abogados, jefes policiales y el ex secretario de Seguridad y actual director de Protección Civil, Marcos Escajadillo, con narcotraficantes. Durante el encuentro, Del Frade les entregó una carpeta a los legisladores en las que amplía los contenidos de la investigación publicada el pasado viernes por la revista El Guardián, y una copia de la denuncia de un ciudadano rosarino quien dijo haberle sacado una foto a Escajadillo mientras cambiaba dinero en una casa de cambio ilegal. El periodista aclaró ante la consulta de los legisladores que tuvo acceso al bibliorato entregado por los funcionarios nacionales, pero que "técnicamente, no hay expediente". El titular de la Comisión, Héctor Acuña (PJ), adelantó que solicitarán una entrevista con el juez Torres para saber "si piensa dar inicio a un proceso para que efectivamente la información brindada por dos secretarías y aportada por algunos medios tenga un sentido jurídico".

El periodista fue recibido en la sede Rosario de la Cámara Baja, además de Acuña, por los diputados Maximiliano Pullaro (UCR), vicepresidente de la Comisión, Alicia Gutiérrez (Si), Oscar Urruty (PPS), Eduardo Toniolli y Oscar Daniele (PJ). También participaron del encuentro las diputadas Aliza Damiani (PJ) y Miriam Cinalli (La hora del Pueblo). Quien no pudo llegar a la reunión fue el legislador Germán Mastrocola (Pro) debido a un piquete en la Autopista.

Del Frade les entregó a cada uno de los legisladores una carpeta en las que amplió los resultados de una investigación que fue publicada la semana pasada por la revista El Guardián -que aún no llegó a Rosario- a partir de su intervención en la Comisión Investigadora independiente del Triple Crimen de Villa Moreno. "Allí aparecen con mucha nitidez las complicidades del grupo liderado por la familia Cantero, más conocidos como la Banda de los Monos, con la comisaría 19, para los cuales trabajaba el grupo de los Quemados, imputados de ser los asesinos de los tres muchachos el 1º de enero de 2012", relató el periodista.

Según Del Frade, la causa de Villa Moreno es muy importante porque establece "cómo comienza a funcionar el entramado de relaciones que supone hoy el narcotráfico". Sobre la investigación por la cual fue invitado, el periodista relató que en octubre del año pasado fue contactado por dos secretarios nacionales, que pidieron hasta el momento reservar su identidad, y el 24 de noviembre un funcionario nacional acompañado por un integrante del Poder Judicial Federal, le habla de la presentación que hicieron ante el Juzgado Federal Nº 12 de Capital Federal, a cargo del juez César Torres, de "un voluminosos bibliorato donde consta la información suministrada por dos secretarías nacionales ante Torres, quien la recibe y da cuenta a la Policía Federal para que investigue".

El periodista destacó que figuran en el bibliorato "funcionarios policiales, empresarios, abogados, y aparece mencionado en un entramado mucho mayor de lo que tiene que ver el narcotráfico en Rosario, el nombre del actual secretario de Protección Civil de Santa Fe, Marcos Escajadillo. Aparecen allí los números telefónicos del doctor Escajadillo y del hombre que es el encargado de una cueva de dinero ilegal que funciona en las cercanías de la intersección de las peatonales San Martín y Córdoba, en donde Escajadillo cambiaría presumiblemente dinero proveniente de unos de los 400 kioscos de drogas que están mencionados en ese informe. Allí aparece que Escajadillo llega a cambiar seis millones de pesos, pero no hay escuchas decididamente vinculadas a Escajadillo".

Del Frade precisó que en las últimas semanas se han agregado otras pruebas, que adjuntó en las carpetas, como una "presentación que hace un ciudadano de Rosario, José Cándido, que ratificando los dichos periodísticos que habíamos realizado, presenta una denuncia ante la Fiscalía Federal Nº 3 diciendo que él había visto en su momento a Escajadillo, llamándole la atención la enorme cantidad de dinero que cambiaba en ese lugar. Incluso le saca una fotografía, con un sistema de rollos en abril del 2008".

-¿El presenta la foto?- le preguntó Acuña.

-El presenta la información y la denuncia. Lo que sé, hasta el día de hoy, es que la foto todavía no la pudo encontrar.

-¿Usted tiene acceso a los biblioratos, pero están las actuaciones procesales del expediente, Usted lo vio?- preguntó Pullaro.

-El expediente no existe en sí, no hay expediente técnicamente, tuvimos acceso a la información. En agosto del año pasado se presentó este bibliorato, con la idea que tienen los dos funcionarios nacionales de producir un expediente judicial y que tenga rápida resolución. En octubre, y acuérdese de la causa (Hugo) Tognolli, el doctor Torres encarga a la Policía Federal que realice una investigación sobre ese bibliorato, porque a prima facie le da la sensación que es muy importante.

Del Frade agregó que en el informe ampliado de su investigación periodística, los legisladores podrán ver "los nombres de los líderes de los grupos de narcotraficantes vinculados a abogados, empresarios, a razones sociales y empresariales, y a contratos firmados por esas empresas. Y falta todavía una larga lista de policías que están nombrados también en ese bibliorato". Según el periodista, con esa información, los diputados pueden intentar "rastrear el lavado de dinero en Rosario que es el corazón del narcotráfico, y en eso necesariamente tiene que haber colaboración entre lo gobiernos nacionales, provinciales y municipales".

Al término del encuentro el diputado Acuña señaló: "Nosotros somos una caja de resonancia, no somos una Comisión Investigadora, sí creo que cada legislador tiene un volumen de información como para asumir una responsabilidad". El diputado Urruty, en tanto, expresó su preocupación porque el Ministerio de Seguridad no lo haya convocado a Del Frade para tomarle esas denuncias, y que "no le haya proporcionado seguridad" por el peso de sus denuncias. Por su parte, Pullaro pidió "prudencia" porque hasta el momento "no existe un expediente" sobre la causa, pero dijo que tomará con responsabilidad "la valiosa e importante información" que recibió.