Desde Santa Fe

"Les agradezco la confianza y el honor", les dijo Luis Rubeo a sus colegas apenas le renovaron el mandato hasta 2014. Destacó la "oposición responsable" del justicialismo garantizó la "gobernabilidad de la provincia". Rubeo cosechó 38 votos, tras cerrar un acuerdo en el PJ que le permitió sumar una mayoría de 21 voluntades en un peronismo cada vez más atomizado en doce bloques y astillas internas -entre ellos dos a pedido de Jorge Obeid﷓ y el resto, en las minorías: el Frente Progresista y la mitad del Pro. Enfrente, quedaron siete legisladores que responden a María Eugenia Bielsa, Omar Perotti y el secretario de Transporte de la Nación, Alejandro Ramos, que no lograron definir una estrategia: cuatro del sector de Bielsa repitieron el desafío de 2011 y 2012 y votaron a Pablo Di Bert y los otros tres no ingresaron al recinto. Resultado: Rubeo ganó 38 a 3. La mesa de la Cámara se completó con la socialista Inés Bertero (vice 1º) y el macrista Federico Angelini (vice 2º), reelectos por 39 votos a favor y tres abstenciones, las suyas y las de los kirchneristas Gerardo Rico y Eduardo Toniolli, que no los votaron.

La sesión preparatoria comenzó con una formalidad. La diputada Silvia De Césaris propuso como presidenta provisoria a su colega de la UCR, Griselda Tessio. "Ha sido vicegobernadora, demostró una conducta ética en todos los ámbitos públicos y es una defensora innegable de los derechos humanos y de los más desprotegido. Es un honor que presida esta sesión", dijo. Tessio se confesó "muy emocionada" por la propuesta. "Los elogios son parte de la generosidad de todos ustedes", respondió.

El jefe del Frente para la Victoria, Darío Mascioli, propuso entonces a Rubeo para un tercer mandato. Y repasó las virtudes de su gestión: "Trabajo, responsabilidad, seriedad, honestidad, transparencia y defensa de la ley y de la Constitución". "La Cámara ha funcionado como corresponde y tiene un presidente a la altura de las circunstancias", dijo Mascioli. Y cerró con otra flor para Rubeo. "Gracias, por dejarme presidir el bloque kirchnerista, que él integra".

El diputado Oscar Daniele repitió el duelo de 2011 y 2012. Bielsa ya no está en la Cámara, pero ellos no votarían a Rubeo y propuso a su nuevo jefe bloque, Pablo Di Bert. "Sostenemos los mismos criterios", dijo.

A partir de allí, comenzó la ronda de apoyos al ganador. De Césaris alabó sus "cualidades personales". "Es un presidente trabajador, responsable, abierto al diálogo, que tiene una condición que nos enaltece a todos: su calidad humana", lo definió. Oscar Urruty ponderó "la austeridad y la transparencia" de su gestión y la capacidad para lograr "los equilibrios necesarios" en una Legislatura con "tantos fragmentos y espacios internos". Y Tessa elogió su muñeca política para "tejer consensos, dentro y fuera de la Cámara".

El presidente del Movimiento Evita, Gerardo Rico, fue el único que mencionó el compromiso de Rubeo con la Casa Rosada. "Acompaña el proceso que se inició 2003 con Néstor Kirchner y continua ahora con Cristina. Y ese es el elemento central para votarlo, porque es un compañero y un amigo", dijo. Su colega y jefe del bloque de Obeid, Mario Lacava ûque en 2011 votó a Bielsa y en 2012 no ingresó al recinto﷓ explicó por qué ahora había decidido cambiar su voto, junto con la hija del ex gobernador. "Más allá de las calidades personales, lo hacemos como una contribución a la unidad del justicialismo en Santa Fe. Que esta unidad se refleje en la Cámara y ojalá, en un mayor control a la gestión del Poder Ejecutivo", sorprendió.

En el cierre, el radical Santiago Mascheroni justificó el apoyo del bloque oficial a Rubeo. "Se dan las mismas condiciones de la elección anterior (de 2012), hay un acuerdo de la mayoría (los 21 votos del PJ) y eso no es una cuestión formal, sino una decisión política de la mayoría del cuerpo de acompañar a Rubeo. Nos parece un valor importante en un año electoral que va a ser complejo y habrá que garantizar con amplitud y ecuanimidad el funcionamiento de la Cámara, como ha ocurrido. La continuidad de Rubeo está justificada, política e institucionalmente", concluyó Mascheroni.

Rubeo, en tanto, dijo que la "oposición responsable" del justicialismo garantizó la "gobernabilidad de la provincia". "Cuando ciertos analistas y algún interesado auguraban un virtual bloqueo al gobierno de Antonio Bonfatti, nosotros le demostramos a la sociedad que se puede hacer oposición sin obstruir, sin golpes bajos, acompañando lo bueno y rechazando lo malo". Rubeo no identificó al "interesado", pero bien se puede deducir que es Hermes Binner, cuando denunciaba a los legisladores del PJ por "poner palos en la rueda",

"Soy un convencido de que siempre es mejor debatir que imponer, que siempre será mejor para todos privilegiar el diálogo por difícil y complicado que sea", dijo Rubeo. "Somos conscientes de que nos toca ser oposición, pero como tenemos vocación de alguna vez volver a gobernar esta provincia nos asumimos como una oposición responsable. No compartimos en absoluto la idea de hacer oposición por la oposición misma, todos sabemos que en política ganar elecciones es importante pero no puede ser un fin en sí mismo", agregó.

Rubeo destacó "el empeño y la disposición puesta entre todos en garantizar la convivencia política y el derecho al disenso. Fue ésta una de las principales metas que me fijara al asumir el año pasado y puedo decir con seguridad que hemos cumplido con ese objetivo".

"En una relación de fuerzas políticas inédita en la vida institucional de la provincia, con mayorías legislativas cumpliendo el rol de oposición, creo que hemos sabido construir los espacios necesarios para que todos los sectores de la Cámara pudieran expresarse en igualdad de condiciones", concluyó.