"Tuvimos que reconstruir hasta el café. Los primeros días me decían: `acá está el café, Almirante'", contó ayer el primer gobernador santafesino de la recuperada democracia, José María Vernet, que resultó electo el 30 de octubre de 1983, después de la distinción que recibió en la Legislatura, junto al ex diputado nacional Luis "Changui" Cáceres. En el acto por los 30 años de la recuperación del estado de derecho estuvo también el gobernador Antonio Bonfatti, quien destacó: "Después de 30 años, volvemos a celebrar la vida y la libertad. Eso fue lo que significó recuperar la democracia. En democracia pudimos reconstruir la identidad de hijos y nietos de desaparecidos, y seguiremos trabajando por aquellos a los que todavía les debemos su identidad".

Vernet también rememoró que "en el discurso de asunción del 11 de diciembre leí una hora y pico de planes de gobierno pero cuando lo terminé de leer sabía que no iba a servir de nada si no lográbamos sentar a otro gobernador cuatro años después". Las elecciones del 30 de octubre de 1983 consagraron a Raúl Alfonsín como presidente de la República y a Vernet, del Partido Justicialista, como gobernador santafesino.

La ceremonia de ayer fue organizada por la Cámara de Diputados, que realizó una sesión especial. "Tenemos muchísimos deberes por delante, pero la democracia se construye todos los días y hemos avanzado mucho. Podemos dialogar, podemos lograr consensos, podemos innovar y es muy necesario que lo hagamos porque las sociedades cambian. En democracia se respetan las diferencias; por eso siempre nos da la posibilidad, a partir del diálogo y del disenso, de poder encontrar los acuerdos", afirmó Bonfatti.

El acto lo encabezó el presidente de la Cámara de Diputados provincial, Luis Rubeo, quien expresó: "Creemos que la revalorización de la política es la herramienta que ayuda a fortalecer la convivencia democrática a través de la participación y el debate plural y pacífico de ideas".

Rubeo subrayó como "un gran gesto" que ayer estuvieran "todos juntos" en la Legislatura. "Es el lugar donde conviven las más diversas expresiones políticas elegidas por el voto popular. Lugar que guarda memorias de antológicos debates y discursos, pero también donde tantos santafesinos han acudido en busca de soluciones para sus problemáticas".

El presidente de la Cámara enfatizó que la última dictadura cívica militar "no pudo destruir los proyectos e ideales. Y qué mejor muestra de ello, es que estemos hoy aquí, con 30 años de democracia en los hombros para honrar la memoria de los perseguidos, los caídos y los desaparecidos diciendo con convicción: luchamos por los mismos ideales, defendemos los mismos intereses y peleamos las mismas reivindicaciones".

Frente al ex gobernador, Rubeo enumeró los tres actos más importantes del gobierno provincial desde 1983 a 1987: "El primero de ellos fue la ley votada unánimemente por todos los diputados y senadores declarando de nulidad absoluta la ley de jubilaciones de privilegio que los militares se habían autoconcedido para ellos y sus funcionarios civiles". "La segunda --continuó-﷓ se refiere a la nueva ley de coparticipación que logró sancionarse después de tantas discusiones y que fue una piedra fundamental para contar con un criterio de distribución de los recursos más equitativo".

Rubeo también enfatizó "la comprometida actitud del gobierno provincial de entonces ante el alzamiento carapintada de Semana Santa de 1987, allí en momentos en que la continuidad democrática se encontraba fuertemente amenazada, no se dudó, se dictó la Emergencia Constitucional y Vernet y todos los legisladores cerraron filas, constituyendo la sede del gobierno en el Concejo Municipal de Rosario".

Bonfatti expresó el "gran orgullo" de ser gobernador de una provincia en la que "el Poder Ejecutivo es de un signo político y las cámaras legislativas, de otro. Avanzamos y mejoramos todos los días la calidad institucional de Santa Fe. Prueba de ello fueron estas últimas elecciones, donde no hubo un sólo inconveniente en toda la provincia. Tenemos que valorar este espacio que tenemos, de diferencias pero de respeto, que es en definitiva lo que nos hará trascender en la historia".

Del acto participó también Celina de Koffman, Madre de Plaza de Mayo de Santa Fe. "Vivo esta fecha con alegría y emoción", aseguró al culminar el acto. "Recuerdo cuando asumió Raúl Alfonsín, cómo celebrábamos la llegada de la democracia en la Plaza de Mayo. Con sólo ver la cara de alegría de la gente hoy en día me emociona mucho", agregó.

"Queca", de 86 años, indicó además que "nuestros hijos siguen acompañando, dando fuerzas, iluminando un camino para mantener la democracia por siempre. Con sus tropiezos, hay que seguir en democracia, pero debemos aprender de nuestros hijos que el enemigo no está en el partido político contrario, sino que el enemigo sigue agazapado".