La policía del sur santafesino desbarató una banda dedicada al robo en casas de familias, salideras y robos rurales que asoló la región entre febrero y octubre de este año. El propio ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, anunció el medio centenar de allanamientos con ocho detenidos y el secuestro de una granada de guerra, pistolas nueve milímetros y calibre 45, una escopeta 12.70, tres handys con frecuencia policial y chalecos antibalas, acompañado por fiscales y jueces, y la cúpulas policiales que trabajaron en el denominada "Operación AO12", en referencia a la segunda circunvalación que conecta los territorios donde se cometieron los delitos. Si bien la banda desbaratada en el sur tenía lógica importancia, el gesto de Lamberto de aparecer rodeado de jefes refrendados en su tarea luego de la revuelta policial, pareció un acto reflejo después del mal momento que pasó en Santa Fe cuando solo 24 horas antes junto al ministro de Gobierno, Rubén Galassi, fueron increpados por el intendente capitalino José Corral (UCR) por el mal desempeño de la fuerza a su cargo.

Junto al fiscal de Cámara Guillermo Camporini, los fiscales Marcelo Vienna y Cristina Herrera y el juez Javier Beltramone, Lamberto anunció la concreción de "47 procedimientos en los departamentos Iriondo, Caseros, San Lorenzo, Villa Constitución y Rosario".

"Esta investigación permitió intervenir ocho líneas de teléfonos, determinar cadenas de responsabilidades. Estos operativos son el inicio de un proceso de intervención a un grupo de personas a las que se las sindica como responsables de bandas que actuaban en hechos contra la propiedad, en salideras, en robos rurales, en entraderas que están identificados, e incluso se han detenido a varios cabecillas del grupo".

Hasta el momento hay ocho detenidos, cinco varones y tres mujeres, y hay 53 órdenes de allanamiento cumplidas y una docena de órdenes más por concretar. Según el titular de la cartera de Seguridad "se han encontrado una granada de guerra, pistolas nueve milímetros y calibre 45, una escopeta 12.70, tres handys con frecuencia policial, además de chalecos antibalas". "Esta investigación ha demandado la transcripción de 1900 fojas de escuchas concretadas", agregó.

Según Lamberto "se están investigando 47 hechos en distintas localidades", en algunos de los cuales han terminado con heridos, entre ellos una entradera en Rosario.

La jornada pareció completa para mostrar una buena perfomance policial: tres allanamientos simultáneos en la zona norte rosarina desembocó en la detención del padre y de un hermano de Ema Pimpi, uno de los dos detenidos por el atentado a la casa del gobernador Antonio Bonfatti. Pero el motivo por el que ayer de mañana arrestaron a José Sandoval, de 48 años, y a Brian, de 20, no tiene relación con ese caso sino con el desbaratamiento de un bunker de drogas que funcionaba en Cavia al 1300. Agentes de la Dirección de Control y Prevención de Adicciones y de las Tropas de Operaciones Especiales apresaron a padre e hijo, y a un tercer hombre en Miller al 1200. Hubo decomiso de cocaína y de marihuana, teléfonos y unos 2.300 pesos en efectivo. El padre de Ema Pimpi, señalaron, tenía pedido de captura pendiente por amenazas coactivas y abuso de armas. Investiga el juez federal Carlos Vera Barros y el fiscal Marcelo Degiovanni.

La reacción ministerial se dio luego de una jornada difícil en la capital provincial cuando el intendente Corral increpó a los ministros Lamberto y Galassi por el desempeño policial frente a un grupo de periodistas santafesinos.

Corral tuvo entonces un aliado poco frecuente: el diputado Héctor Acuña (PJ). El legislador provincial Héctor Acuña señaló: "Nos parece importante que el jefe político de la ciudad se ponga el tema de la seguridad al hombro; es trascendente para Santa Fe que el intendente Corral se haya dado cuenta que, efectivamente, lo que hace dos años venimos denunciando no era una ilusión, sino que era la descripción de la realidad".

"No hay patrullaje preventivos en la ciudad de Santa Fe. Hace dos años que venimos haciendo el relevamiento de las comisarías, móviles policiales y la cantidad de agentes afectados por turno en los locales oficiales", expresó Acuña.