El agua que cubre una vasta región del norte santafesino, alimentada por un temporal que arrancó en diciembre y que desde entonces descargó más de 1.000 milímetros de lluvias, activó los resortes gubernamentales. Los referentes de la producción local y el gobierno promovieron un pedido al gobernador Antonio Bonfatti para que se declare en emergencia a cuatro departamentos y algunos distritos de otros tantos.

Los miembros de la Comisión Provincial de Emergencia Agropecuaria se reunieron ayer por la mañana, convocados por el ministro de la Producción, Carlos Fascendini para comentar las últimas novedades sobre la evolución de la inundación en el norte (foto). Estaban el secretario del Sistema Hídrico, Forestal y Minero, Roberto Tión, el director provincial de Desarrollo Territorial, Sergio Casado; y representantes de distintas áreas de Gobierno, integrantes de las Comisiones de Agricultura y Ganadería de ambas cámaras legislativas, los senadores de los departamentos involucrados y delegados de cada una de las entidades vinculadas a la actividad agropecuaria de la provincia, INTA y SENASA, entre otros.

"En el encuentro hicimos un repaso de los informes técnicos sobre las distintas regiones de la provincia que están presentando problemas por las intensas lluvias. A priori, sabemos que hay inconvenientes en Garay, Vera, General Obligado, San Javier y distritos de San Cristóbal, 9 de Julio, Castellanos y San Justo", enumeró el funcionario.

"Una vez realizado el análisis de cada región, se decidió qué departamentos y qué distritos serán propuestos para que el gobernador declare en situación de emergencia", agregó.

El ministro destacó que "hay que tener en cuenta que, según los pronósticos estos fenómenos continuarán, por lo que seguramente tendremos que convocar a otra reunión para ir monitoreando cada situación".

Los informes refieren que en los cultivos de girasol, ya en etapa de cosecha, hay problemas que amenazan la producción. También las lluvias interrumpieron la siembra de la soja de segunda que todavía estaba pendiente, y el estado de los caminos y del piso mismo de los lotes incluso impidió el ingreso de equipos para realizar control de malezas y fumigaciones, vital para el éxito de la campaña.

En cuanto a la ganadería, el anegamiento provocó el traslado de animales a terrenos que no estén afectados; al mismo tiempo que se espera que el río no crezca para no presentar problemas adicionales con el ganado en las islas, se informó en la reunión.

Fascendini destacó la implementación del certificado provisorio de tránsito de animales que estén alcanzados por las consecuencias del fenómeno. El trámite para obtener dicho certificado se encuentra disponible en el sitio web oficial del gobierno provincial, en la sección del Ministerio de la Producción.

A la Nación

Mientras los representantes provinciales planificaban el pedido de declaración de emergencia, el senador nacional Rubén Giustiniani tramitaba ante el Ministerio del Interior de la Nación una asistencia financiera para la misma región afectada. "El centro norte de la provincia de Santa Fe, principalmente los departamentos 9 de Julio, Vera, General Obligado, Garay, San Cristóbal, San Javier, San Justo y Castellanos, atraviesan una difícil situación producto de las lluvias acumuladas y de las precipitaciones registradas en los últimos días", expuso el socialista. Y solicitó a la cartera de Florencio Randazzo que "adopte con urgencia mecanismos de asistencia financiera y social previstos para tales circunstancias".

"Si bien tanto las autoridades locales como las provinciales pusieron en marcha los mecanismos previstos para atender las situaciones derivadas del exceso hídrico, atender y canalizar ayuda social a los afectados, la situación es altamente preocupante y requiere de la necesaria asistencia de los organismos nacionales", señaló Giustiniani.