El candidato a gobernador del Pro, Miguel Torres del Sel, se emocionó y lloró en un programa de televisión por las críticas que recibió en la campaña. "Las cosas que tuve que aguantar fueron terribles", dijo con voz entrecortada. "Me gastan, me gastan. Y quieren lograr esto (que se quiebre), pero le voy a meter muy fuerte de acá al 14 de junio. La gente está buscando un cambio y se lo vamos a dar", prometió. Justificó sus lágrimas ante supuestas operaciones mediáticas para "modificar todo lo que digo. Es una cosa extraordinaria. No tienen ni siquiera conciencia del daño que provocan. Pero soy fuerte. Tengo 57 años, no soy una criatura", se consoló.

El cómico participó el martes a la noche en el programa "Los Leuco" de TN, en un panel con sus adversarios del Frente Progresista, Miguel Lifschitz y del Frente para la Victoria, Omar Perotti. No hubo cruces. Fueron entrevistas separadas en las que cada uno relató su vida y su trayectoria política. Si hay debate, serß el 7 de junio, una semana antes de las elecciones del 14, en una transmisión simultßnea de los dos canales de aire de Rosario (3 y 5), según se confirmó ayer.

En el último tramo, le preguntaron a Del Sel si estaba "mßs contenido" después de los revuelos que provocaron sus declaraciones públicas. "No estoy contenido y voy a mostrarme tal cual soy, como corresponde. No soy un hipócrita", respondió.

"El problema es que dan vueltas las cosas. Hay una campaña armada para modificar todo lo que digo. Es una cosa extraordinaria", dijo. "Hace cinco años, en un programa deportivo, conté una anécdota familiar de hace 50 años, cuando mi viejo me corrió con un cinto. Yo era muy rßpido en el patio, era difícil que me alcanzara. ¿Y que salió después? Que Del Sel quiere que les peguen a los alumnos en las escuelas. Yo no dije nada de eso, conté algo que me había pasado a mí hace 50 años. Yo fui docente, profesor de Educación Física y nunca toqué un pibe, al contrario. La semana pasada, el Papa dijo que unos chirlos en la cola a veces vienen bien. Así que mßs allß de que Dios me acompaña, el Papa Francisco está conmigo sacó pecho Del Sel.

¿Perdiste amigos por esta decisión de incursionar en la política?

No, perdí a aquellos que antes me decían: 'íMichael!', me abrazaban y me hacían notas y ahora me matan por televisión.

¿Quiénes?

No voy a dar nombres porque si no mañana me matan. Hay gente que le vende el alma al diablo. Seguramente por algo lo deben hacer.

¿Dady Brieva?

No, Dady es mi amigo. Dady, el Chino y yo somos tres hermanos que anduvimos 32 años por la vida haciendo un éxito.

Le mostraron entonces una foto de Susana Giménez y él vestido de mujer. "A La Tota, le debo un par de campos", bromeó Del Sel. "¿Como no voy a estar orgulloso porque lo que hice durante 30 años? Hice reír a millones de personas. Es increíble como me critican por hacer reír".