Desde Santa Fe

El Foro contra la Impunidad y por la Justicia (que integran Madres de Plaza de Mayo, Hijos, Familiares de Desaparecidos y otros organismos de derechos humanos) volvió a pedirle al rector de la Universidad Nacional del Litoral, Albord Cantard, que expulse a los agentes secretos del Ejército que operaron como Personal Civil de Inteligencia (PCI) durante la dictadura. Uno es un funcionario de la UNL ya conocido, César Luis Frilocchi, denunciado en marzo de 2010, desplazado de su cargo de director de Diplomas y Legalizaciones en octubre de 2014 y hoy bajo sumario. El otro es un docente de la Facultad de Ciencias Económicas, José Carlos Luján Farías, quien también integró el elenco de los PCI, según la denuncia del Foro. Cantard recibió los escritos en su propio despacho, donde se agregó un tercer pedido aun no formalizado de los egresados de la Universidad que no quieren tener un diploma firmado por Frilocchi. El rector escuchó los planteos, dijo que el expediente que se le abrió al PCI está en el tramo final de la producción de pruebas y la denuncia contra Farías será derivada a Ciencias Económicas, donde debería tramitarse un juicio académico. "Ya es tiempo que no haya más soplones de la dictadura enquistados en la Universidad", dijeron.

La entrevista de Cantard con los representantes del Foro es la tercera que les concede desde el año pasado. Ya los recibió en junio de 2014, cuando aportaron pruebas contra Frilocchi y luego en octubre, cuando les anunció que el ex director de Diplomas y Legalizaciones había sido desplazado de su cargo.

Ayer, los dirigentes del Foro volvieron a pedirle al rector de la UNL la "inmediata expulsión" de Frilocchi, pero también deunciaron a otro ex PCI, el contador José Carlos Luján Farías, que es docente en Ciencias Económicas.

El abogado de Hijos, Guillermo Munné, dijo que le pidieron a Cantard, que "no demore más el sumario a Frilocchi porque colaboramos mucho para que pudiera resolverse". "El rector nos agradeció la cooperación, pero dijo que faltaba agregar algunas pruebas para completar el trámite", agregó.

Según Munné, el rector de la UNL "espera un informe del Ministerio de Defensa sobre la tarea que cumplieron los PCI durante la dictadura" y "la declaración de los testigos aportados por la defensa de Frilocchi, entre ellos dos diputados provinciales a quienes les remitieron oficio para puedan contestar por escrito. Ya contestó el diputado Héctor Acuña, pero aún falta la respuesta del diputado Eduardo Toniolli. Otro testigo que tiene que declarar es el secretario general de Apul, el gremio de los trabajadores no docentes de la UNL, Rubén Nuñez", explicó Munné.

Cantard dijo que "después de eso, estará en condiciones de resolver el sumario, lo que no demandará mucho tiempo", dijo el abogado. "La resolución del sumario será del propio rector, que no quiere que haya planteos de nulidad por algún tipo de prejuzgamiento", agregó.

"Y con respecto a la denuncia contra Farías, el rector dijo que van a estudiar el caso pero adelantó que no sería el mismo procedimiento, ya no un sumario administrativo en el Rectorado de la UNL, sino un juicio académico que lo tendría que tramitar la Facultad de Ciencias Económicas", señaló Munné. "Farías fue PCI del Ejército Argentino, según su legajo personal, dentro de la estructura de la última dictadura cívico militar", reveló el Foro.

El punto de "convocatoria contra la impunidad" "como se llamó a la marcha había sido en la vereda de uno de los edificios de la UNL, en el macrocentro, en Junín al 3400, donde hoy trabaja Frilocchi y funcionan la Planta de Alimentos y el Observatorio Social UNL. La movilización se realizó bajo las consignas "Basta de espías genocidas en nuestra universidad. Basta de impunidad" y llegó hasta las puertas del Rectorado, en bulevar Pellegrini, donde Cantard abrió las puertas de su despacho para recibir a los militantes de derechos humanos.

El Foro dijo que Frilocchi era un PCI que operaba como "agente de reunión". Su tarea era "infiltrarse en la Universidad y en organizaciones políticas y sociales" con una identidad falsa: Carlos Lucas Fernández o Carlos Leandro Fittipaldi.

"Fue nombrado por el interventor militar de la UNL, coronel José H. Núñez, en un cargo de no docente en la sección de alumnado de la Facultad de Ingeniería Química en abril de 1976, para tener acceso a los legajos de todos/as los alumnos" y durante años desempeñó la "doble función de empleado de la UNL e informante del Ejército".

"Prestó servicios en el Destacamento de Inteligencia Militar 122, bajo el mando del suboficial Eleodoro Jorge Hauque compañero de tareas del torturador condenado Horacio Américo Barcos".