Habló María Eugenia Bielsa. Luego de varios meses sin declaraciones, en los que se recluyó, como a ella le gusta, lejos de los medios, aceptó una entrevista con Rosario/12. La ex vicegobernadora admitió que en las últimas semanas intensificó una ronda de reuniones con dirigentes del peronismo, pero no con fines electorales, sólo para "mirarse para adentro". Como condición para reunirse, pide que no le pregunten si va a ser candidata el año que viene. Por lo pronto, sí fue muy crítica con el presidente Mauricio Macri, porque "prioriza los intereses de los poderosos por sobre los intereses del pueblo". Por otro lado, la arquitecta le pegó a los peronistas que apoyaron al kirchnerismo y ahora, fuera del gobierno, lo critican. "Hay una muy mala intención en aquellos propios que intentan desligarse de lo que en su momento apoyamos", remarcó.

-¿Mantiene una participación activa en política en este momento?

-Me estoy reuniendo como siempre con muchos compañeros y estoy hablando con las mismas referencias políticas y personas con las que tengo afinidad. Nunca dejé de hacerlo, lo hago de una manera militante, con muchos compañeros de base y algunos dirigentes. Pero algo que tiene que ver con mirarnos a nosotros mismos y al peronismo hacia dentro, que pensando en la provincia y el futuro.

-¿Pero esos encuentros tienen una mayor intensidad en las últimas semanas?

-Hay una mayor intensidad de llamados y esas cosas, pero no me parece que sea un momento para pensar en eso. El país está tan convulsionado, la realidad es tan distinta a la que imaginamos...yo nunca imaginé que volveríamos a ver muchas de las cosas que estamos viendo. Hay como un dejavú, estamos viendo las mismas cosas que se vieron en la década del 90. Eso merece mucho más una reflexión y otra reflexión sobre nuestra gestión que pensar en 2017. La verdad que 2017 todavía está muy lejano cuando tantas cosas nos están pasando.

-¿Tiene una valoración negativa del gobierno nacional?

-No quiero decir una visión negativa porque me parece que hay gente que lo votó (a Mauricio Macri), hay gente que confía, que cree que este momento es un tránsito necesario. A mí me parece que hay cuestiones que no tienen ver con lo necesario, sino que son decisiones profundamente ideológicas y pensadas y sostenidas desde una concepción ideológica, que yo no comparto.

-¿Puede desarrollar?

-Una visión que prioriza los intereses de los poderosos por sobre los intereses del pueblo. Eso es un resumen, después uno puede analizar segmento por segmento. Pero me parece que fundamentalmente eso, esa es la sensación que uno tiene. El peronismo está absolutamente ligado a los intereses del pueblo, a las necesidades de la comunidad y a lo que uno ha recogido con sus errores durante todos estos años, pero hoy uno ve que las decisiones políticas van en otro sentido. La realidad es que me parece que lo serio, lo oportuno, lo adecuado para esta instancia es no distraernos en una cuestión electoral.

-Post derrota de Scioli, se marcó una división entre kirchnerismo y PJ, ¿cuál es la alternativa para recuperar peso en la provincia y el país?

-Yo no hago esa distinción. Siempre apoyé claramente las políticas de lo que fue el Frente Para la Victoria y me parece que es un espacio dentro del peronismo, siempre lo pensé de la misma manera. Creo que hay una muy mala intención en aquellos propios que intentan desligarse de lo que en su momento apoyamos.

-¿Hay dirigentes peronistas que se han olvidado de su apoyo ferviente al kirchnerismo?

-Por eso no hay que ser ni tan ferviente con los apoyos ni tan desagradecido con el desapego. Creo que hay tratar de ser coherente, realmente creo que hubo políticas en estos años que todos los argentinos podemos sentirnos orgullosos, y fueron importantes, trascendentes y enormes en su magnitud. Y también hubo muchos errores. Así como veíamos los errores antes, no ahora, no me voy a desdecir de los desaciertos de esas políticas. Ojalá se pudieran sostener, ojalá que un país serio pueda sostener lo más virtuoso de cada gobierno.

-¿Identifica en Santa Fe a dirigentes que se hayan olvidado de su apoyo al FPV?

-No es mi rol señalar a nadie, cada uno se señala su propia conciencia. Me gustaría que señalaran si piensan distinto o piensan distinto porque la sociedad piensa distinto. Después deberán dar cuenta de eso, uno da cuento por sí mismo. Yo siempre interpreté al kirchnerismo como un espacio dentro del peronismo, un segmento inclusive temporal. Nunca lo escindí del peronismo, me parece que siempre estuvo identificado con principios, valores doctrinarios, con el espesor doctrinario del peronismo. Y me parece que ahora hacer ese esfuerzo por desprenderse de los errores que hayamos cometido, no es bueno. De los errores hay que aprender, no hay olvidarlos o creer que uno no participó.

-¿Falta conducción en el peronismo de Santa Fe para organizar el momento?

-Bueno, siempre es bueno que haya una conducción fuerte. De hecho no podemos decir que falta, o hay o no hay. Es un momento donde hay conducciones no tan fuertes o no tan univocas, son más fragmentarias o frágiles. Es una descripción, no una crítica.

-¿Para este momento hacen faltan referencias más fuertes?

-Más que referentes más fuertes, quienes estuvieran dispuestos a mostrar con mayor fortaleza o a expresar sus ideas con mayor fortaleza. Digo porque hay voces que se escuchan más que otras y ocupan lugares más protagónicos que otras. La realidad es que tanto dentro de la provincia como fuera hay muchas cosas que decir. Veía el tema del debate sobre los subsidios de la EPE y por qué no le llegaban a los habitantes de Santa Fe. Me hubiera gustado que algún dirigente que hoy tenga una voz de representación pudiera decir lo que nosotros veníamos diciendo cuando estábamos en la Cámara durante cuatro años, que realmente eso estaba pasando en la EPE. Recuerdo mucho la persistencia con la que (el ex diputado) Mario Lacava tocaba este tema y no era escuchado por nuestros propios compañeros. Lo que la ex presidenta dijo es algo que muchos diputados peronistas sostuvieron en su momento y no fueron escuchados. Ahora parece que el socialismo se sorprende que alguien diga eso, no. Eso se dijo y basta buscar los libros de sesiones para ver la palabra de Lacava.

-¿Le piden que sea candidata en las reuniones que mantiene?

-Tenemos un acuerdo, de esas cosas no se habla ¿sabés que me parece a mí? Lo he dicho otras veces y lo sigo pensando. Un año es un abismo, el candidato del o de los espacios debe ser aquel que mejor conjugue con la sociedad en el momento que hay que representarla. Tener la ambición de ser candidato por la ambición de ser candidato es un error que no nos podemos permitir, mucho menos ahora donde está en juego un modelo de país. Falta tanto para el 2017, tanto en un país que está todos los días convulsionado, debatiéndose entre lo que puede, debe o quiere ser, que el candidato debe ser aquel que mejor represente a la sociedad en el momento que haya que nombrarla.

-Pero más allá de eso, ¿está dispuesta a participar activamente?

-No dejé de participar, que ustedes no me vean haciendo declaraciones no quiere decir que uno no participe. Hay momentos para participar como militante, para participar de las discusiones políticas, momentos para estudiar y prepararse. Uno no tiene que ser un funcionario o legislador para siempre. Es muy deseable que esos roles varíen, que puedan ser distintas personas. Estos años seguí participando activamente, de otra manera, a lo mejor no con visibilidad.

-Pero usted no es una dirigente cualquiera.

-Soy una dirigente más. Te vuelvo a decir, miremos la realidad de hoy, quien uno no pensaba que iba a estar en un lugar está. Quien uno pensaba que iba a estar en un lugar no está. Yo cada vez más me anclo en esa idea, que la sociedad necesita representarse por determinadas coyunturas en ciertas figuras. A veces prima la comunión con el pueblo, a lo mejor hoy primarían valores como la honestidad. Lo importante de todo esto es no dejar de trabajar, seguir fiel a sus convicciones, no engañar. Siento que es una obligación del dirigente, es pecado engañar. Hay que trabajar desde el lugar que toque, no es más importante el lugar que toque. Lo más importante es lograr que triunfen las convicciones a las que uno adhiere.

-Habló del gobierno del Macri, ¿qué le parece el de Lifschitz?

-Todavía no veo bien cuál es la línea de dirección, todavía no se ha expuesto claramente y ya debería estar marcada. La idea del socialismo era la idea de una continuidad, pero uno tiene la sensación de que el ingeniero Lifschitz estaría pensando en una refundación de una línea de acción, pero todavía no la veo.